El papa Francisco abrió ayer las inscripciones para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Cracovia (Polonia) en 2016 mediante una tableta delante de los fieles que asistieron al rezo del Ángelus. El pontífice invitó a dos jóvenes a acompañarle en la ventana del Palacio Apostólico desde la cual ofició, como es habitual los domingos, ante la multitud que se congrega en la Plaza de San Pedro y mostró el dispositivo.

Pulsando sobre la pantalla de la tableta, como se pudo ver en la transmisión televisiva del momento, el papa declaró haberse inscrito para la JMJ 2016 como "primer peregrino" al evento.

"He querido abrir yo mismo las inscripciones y me acabo de registrar como peregrino mediante el dispositivo electrónico", explicó Bergoglio a los congregados.

La próxima edición de la JMJ tendrá como principal homenajeado al papa Juan Pablo II, el creador del evento, que fue cardenal de Cracovia y que fue canonizado en 2014. La Jornada Mundial de la Juventud fue creada en 1984 cuando, tras concluir el Año Santo de la Redención, Juan Pablo II entregó a los jóvenes una cruz de madera de cuatro metros de altura invitándoles a llevarla por todo el mundo.

Además, el papa hizo un llamamiento a las "autoridades competentes locales e internacionales" para obtener la libertad de las personas secuestradas en zonas de conflicto.

Francisco recordó a los obispos ortodoxos secuestrados en Siria "y a todas las otras personas que, en zonas de conflicto, han sido secuestradas" tras el tradicional rezo del ángelus, seguido por numerosos fieles en la Plaza de San Pedro.

"Espero el renovado esfuerzo de las autoridades competentes locales e internacionales a fin de que se restituya pronto la libertad a nuestros hermanos", dijo el pontífice.

"Con afecto y participación en su sufrimiento, queremos recordarles en la oración", dijo Bergoglio.

El papa citó en concreto al sacerdote jesuita Paolo Dall''Oglio, de cuyo secuestro en Siria se cumplirá en breve el segundo aniversario y que se sospecha está en manos de alguna organización islamista. En cuanto a los obispos, se trata del metropolitano de Alepo y Alejandría, Bulos Yazigi, y el metropolitano siriaco-ortodoxo de Alepo, Yuhana Ibrahim, que fueron capturados el 22 de abril de 2013, cuando estaban en una misión para lograr la libertad de dos sacerdotes secuestrados cuatro meses antes.

Aunque ningún grupo se atribuyó el secuestro, el Gobierno de Damasco indicó que los autores podrían haber sido islamistas chechenos.