Alcanzar la cima del monte más alto de África, el Kilimanjaro, con 5.895 metros de altura, es el reto que se han impuesto cinco mujeres que han superado un cáncer de mama para demostrar a todas aquellas personas que padecen la enfermedad que frente al cáncer hay esperanza, superación y vida.

"Cuando te diagnostican un cáncer tienes que recorrer un camino con muchas dificultades y retos que superar antes de coronar la cima", ha apuntado la presidenta de la Asociación Española contra el cáncer (AECC), Isabel Oriol, durante la presentación del "Reto Pelayo Vida".

El cáncer se supera -el porcentaje de supervivencia frente a un tumor de mama se sitúa en el 85 por ciento- y, "hay mucha vida durante y después de la enfermedad", ha afirmado Oriol, para quien estas cinco mujeres suponen un ejemplo de que se puede sobrevivir a la enfermedad y asumir retos como éste.

Las protagonistas de esta expedición son cinco mujeres de entre 40 y 55 años a las que la vida ha situado ante un reto que han superado. Ahora son ellas las que han elegido su siguiente meta, que esperan superar juntas y con el apoyo de familia y amigos, tal y como consiguieron derrotar al cáncer.

La idea fue del periodista Eric Frattini, que vio morir a causa de un agresivo cáncer a un amigo suyo con tan solo 39 años, pero que también compartió la historia de una mujer que superó un cáncer de mama que la llevó, además, a adoptar un modo de vida saludable.

Estas experiencias le llevaron a proponer este reto para demostrar que se puede vencer al cáncer y, gracias a la colaboración de la AECC, Pelayo y la Federación Española de Baloncesto, localizar a estas cinco mujeres para poner en marcha la expedición.

Todas ellas tienen experiencia en montañismo, pero sólo una se había enfrentado antes a cimas tan altas como el Kilimanjaro.

Eva García, Rosa Fernández, María Barrabés, Araceli Oubiña y Carmen González-Meneses han sido las seleccionadas para esta aventura, durante la cual contarán con la ayuda del exjugador de baloncesto Ismael Santos, que será su guía en la montaña, y de Nacho Sanz, fisioterapeuta especializado en tratamientos de cáncer de mama.

"Es un reto personal, un reto de superación", ha asegurado González-Meneses durante la presentación de la expedición en la que todas ellas se han mostrado ilusionadas e impacientes por comenzar la aventura y demostrar a todas las personas a las que hayan diagnosticado la enfermedad "que se puede vivir".

Han destacado las similitudes entre la enfermedad y el reto al que se enfrentan a partir del próximo 20 de septiembre, cuando partan de Madrid rumbo a Tanzania. "Para afrontar este aventura necesitamos motivación e ilusión, que es lo mismo que se necesita para superar la enfermedad".

Esta valenciana destaca la fuerza y los deseos de vivir como elementos comunes a las cinco expedicionarias que, si todo va bien, habrán alcanzado su reto el 29 de septiembre.

"Frente al cáncer, esperanza, superación y vida". Este es el mensaje que quieren transmitir y "bastaría con que una sola mujer que tenga cáncer nos vea y diga: "yo también puedo", ha subrayado González-Meneses.