El 53 por ciento de los españoles admite que se siente incómodo en diferentes grados a la hora de relacionarse con personas con discapacidad, según un estudio de la Fundación Adecco.
Las personas con discapacidad, por su parte, elevan al 55 por ciento el porcentaje de personas con las que se relacionan en las que advierten falta de naturalidad e incomodidad.
La Fundación Adecco ha encuestado a 2.000 personas, mayores de edad y residentes en todas las comunidades autónomas, para detectar el grado de penetración de estos prejuicios y paralelamente ha entrevistado a 200 personas con discapacidad para conocer su visión al respecto.
El director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero, señala en una nota que estas cifras ponen de manifiesto que "aún existe mucho desconocimiento en torno a la discapacidad, que se traduce en un excesivo respeto y miedo a decir o hacer algo que pueda ofenderlas, lo que genera situaciones incómodas".
Un 40 por ciento de los encuestados no ha iniciado nunca, voluntariamente, una conversación con una persona con discapacidad, mientras que un 25 por ciento que sólo lo ha hecho para consultar si necesitan ayuda.
El 61 por ciento de los encuestados reconoce que no puede evitar tener una actitud de sobreprotección hacia las personas con discapacidad sin darse cuenta, lo que les conduce a situaciones de discriminación positiva.
No obstante, un 67 por ciento de los encuestados declara que nunca ha tenido la oportunidad de trabajar con una persona con discapacidad, ya sea como compañero, jefe o colaborador.
La Fundación Adecco ha identificado cuatro factores como principales factores de discriminación, que se convierten en frenos para la plena integración de las personas con discapacidad: el desconocimiento, la indiferencia, los prejuicios y la sobreprotección.
Las personas con discapacidad estiman que hay un gran desconocimiento en la sociedad en este ámbito (88 por ciento), mientras que el 58 por ciento opina que la indiferencia es la actitud general hacia ellas y un 65 por ciento advierte la presencia de prejuicios en su entorno.
A pesar de que su contratación tiende al alza, el 64 por ciento de las personas con discapacidad en edad laboral no tiene empleo ni lo busca, lo que se refleja en su escasa presencia en las empresas.
Tomando como referencia el mes de octubre, este año se cumplen tres ejercicios consecutivos de incremento en la contratación de personas con discapacidad, ya que en 2015 han firmado 80.047 contratos, un 15 por ciento más que en el mismo periodo de 2014 y un 54 por ciento más que entre enero y octubre de 2012.