Cáritas Diocesana de Tenerife, con motivo del Día Mundial del Sida, reclamó a las instituciones públicas la necesidad de crear nuevas políticas de prevención del VIH y campañas de sensibilización específicas dirigidas a las personas jóvenes por tratarse de uno de los colectivos más vulnerables.
El Proyecto Lázaro de Cáritas Diocesana de Tenerife atiende personas afectadas por el virus del VIH/sida o que estén en riesgo de padecerla y que, además, presentan un problema multicausal, al sufrir toxicomanías, alcoholemias, trastornos mentales y/o conductuales (patología dual), desarraigo social y familiar, o escasez de recursos económicos. Este año ha acogido a 25 personas y atendido a un total de 41 participantes, de los cuales un 57% (21,5% mujeres y 78,5% hombres) está afectado por el virus del VIH/sida, con una media de 40 años. Desde la entidad señalan que dentro de las campañas de sensibilización "es imprescindible prestar especial atención a los jóvenes, ya que a pesar de la paradoja de los avances sanitarios, donde se han conseguido importantes logros médicos, la edad de diagnóstico cada vez es inferior y está creciendo principalmente entre la población de 20 a 35 años". En cuanto a los datos de población con mayor incidencia, son los hombres que practican sexo con hombres y se ha registrado una disminución de los afectados por consumo de drogas.