La Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) o Selectividad, como es más conocida, nos dice adiós este curso de acuerdo con lo estipulado en la Lomce y después de 41 años haciendo pasar nervios a los cientos de miles de estudiantes que han tenido que superarla para acceder a la universidad.

Si a la Lomce se la conoce como "ley Wert" por el apellido del exministro José Ignacio Wert que la elaboró, la legislación que en 1974 aprobó la prueba que ahora tiene los días contados se la denominó "ley Esteruelas". El entonces ministro de Educación Cruz Martínez Esteruelas puso fin a la reválida existente para todo aquél que quisiera estudiar una carrera, y se intentó dar respuesta a la creciente demanda de estudios universitarios por parte de los jóvenes. Si se echa aún más la vista atrás, el antecedente de estas pruebas se remonta al Examen General de Bachilleres surgido en 1857 del Plan General de Estudios del político Claudio Moyano.

Le siguió en 1926 la reválida del "plan Callejo" (por el ministro de Instrucción Pública o Educación Eduardo Callejo) y durante la República la reválida del "plan Villalobos". Es en 1954 cuando las pruebas de acceso universitario se implantan definitivamente.

En 1974, con la "ley Esteruelas", se regula el examen de Selectividad y en junio de 1975, en las postrimerías de la dictadura, se celebra el primer examen.