Durante este verano la sanidad pública no ha cubierto el 90 por ciento de las bajas del personal por vacaciones, lo que ha provocado el cierre de 10.603 camas, un 10 por ciento del total de las 109.484 con las que cuentan los hospitales del Sistema Nacional de Salud.

Así lo denunció ayer la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en rueda de prensa, en la que el presidente de este sindicato, Miguel Borra, calificó de "superexcesivo" el número de camas cerradas, lo que está generando un aumento de las listas de espera y colapsos en las urgencias.

Tanto Borra como el presidente del sector de sanidad de CSIF, Fernando Molina, reclamaron un plan de choque para reforzar las plantillas e hicieron un llamamiento a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, por su "extraordinaria sensibilidad" como exministra de Sanidad, a que medie con el Gobierno y los partidos para un Pacto de Estado por la Sanidad.

El cierre de camas es una situación generalizada en el conjunto de las comunidades autónomas, aunque destacan especialmente Andalucía (2.350 camas cerradas), Madrid (1.510), Galicia (1.250), Comunidad Valenciana (950) y País Vasco (900).

Borra denunció que desde 2012 se han perdido 24.559 empleos en la sanidad (se ha pasado de 505.185 profesionales sanitarios a 480.626).

Además, las camas públicas han disminuido en 5.000 en los últimos tres años (actualmente hay 109.484), según datos del Ministerio de Sanidad facilitados por CSIF.

Las consecuencias de toda esta situación son una disminución de la actividad asistencial, un aumento de la presión laboral sobre los profesionales, un incremento de las listas de espera, así como urgencias sobresaturadas -se puede tardar de 7 a 8 horas en ser atendido-, y que se colapsan al no poder trasladar a los enfermos a planta.

También se producen más agresiones al personal sanitario ocasionado por el estrés de los pacientes, aseguró Molina.

El representante de sanidad del sindicato puso de relieve que en verano la población a asistir es la misma que en invierno, con la única diferencia de que se desplaza.

Por ello, las zonas turísticas son las que presentan más problemas asistenciales derivados del cierre de camas.

Canarias cierra 312, según el sindicato

De las 10.603 camas hospitalarias que se cierran en toda España en verano, un total de 312 corresponden a las Islas Canarias, según el CSIF. De hecho, el presidente del sindicato indicó ayer en rueda de prensa que en Canarias, el personal tiene problemas "incluso" para coger vacaciones y se han dado casos de tener que utilizar las salas de espera para colocar camas, aseguró Miguel Borra.

Canarias cierra 312, según el sindicato

El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, pidió a las comunidades que garanticen la asistencia sanitaria en verano, mediante la contratación del personal "que sea necesario" para que nadie se quede sin atención médica. "Desde el Ministerio tratamos de garantizar la coordinación y les pedimos siempre que garanticen la atención" y, por tanto, "que dispongan la contratación de personas que sea necesario", recalcó.