El Vaticano publicó hoy la nueva Constitución que regula la vida de las monjas que se dedican a la contemplación, en que se les pide mayor formación, el deber de trabajar y de no reclutar a extranjeras sólo para la supervivencia de los conventos.

La Constitución apostólica "Vultum Dei Quaerere (La búsqueda del rostro de Dios)", firmada por Francisco el 29 de junio, sustituye a la anterior "Sponsa Christi" publicada en 1950.

El papa Francisco ahonda en muchos de los pasajes de la nueva Constitución en los problemas que presentan actualmente los monasterios debido a la crisis económica que ha hecho cerrar muchos de ellos y la escasez de vocaciones.