En el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, el director general de Médicos Sin Fronteras (MSF), Joan Tubau, señala que los ataques a hospitales en zonas de conflicto, como el ocurrido el pasado lunes en el noroeste de Yemen, son "actos sucios, crueles, injustos e intolerables".

En una entrevista con Efe, Tubau subraya que el hospital de campaña de MSF situado en el noroeste de Yemen, que sufrió un bombardeo supuestamente efectuado por la coalición árabe el lunes, en el que hubo diecinueve muertos, quedó "absolutamente inutilizado".

Tras este ataque, MSF decidió evacuar seis hospitales del norte de Yemen ante "la campaña masiva e indiscriminada de bombardeos, que convierte en objetivos a los hospitales, los mercados, las mezquitas y los pozos de agua", remarca.

"Estamos convencidos de que las autoridades yemeníes harán lo posible para que el hospital continúe funcionando y a nosotros nos gustaría poder apoyarles en esa misión, pero no lo podemos hacer mientras continuemos pensando que estamos en posición de ser un objetivo en cualquier momento, en medio de una guerra", resalta el director general de MSF.

Tubau lamenta que, en este contexto, a día de hoy, la organización humanitaria adoptó la decisión "de una crudeza y de una tristeza terribles" de evacuar a cirujanos, anestesistas y pediatras "en una de las zonas del mundo donde más se necesitan".

Considera "intolerable" y "poco creíble" el argumento de los saudíes, que atribuyen el bombardeo a "un error", debido a que estos hospitales son importantes en la estructura sanitaria del país y conocen sus coordenadas.