El sarcoma, del que cada año se diagnostican en España entre 1.000 y 1.500 nuevos casos, es un tumor maligno no solo raro, sino también desconocido por la población en general pero también por los médicos de atención primaria, lo que repercute negativamente en su tratamiento y evolución.

Así lo ha puesto hoy de relieve la doctora Rosa Álvarez, secretaria del Grupo Español de Investigación en Sarcomas (GEIS), en rueda de prensa con motivo de la celebración el próximo 20 de septiembre del Día Nacional del Sarcoma.

Se trata de un tumor que aparece en las partes blandas del organismo (grasa, músculos, nervios, tendones) o en los huesos y representa el 1 % de todos los tipos de cáncer en adultos.

La complejidad de este tumor radica en la gran variedad de subtipos que existen: la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reconocido más de 150 variedades.

La doctora Álvarez, del hospital Gregorio Marañón, ha insistido en el retraso diagnóstico por el desconocimiento que existe de estos tumores y ha incidido en que la derivación temprana a un centro de referencia daría lugar a una mejor supervivencia, menos recaídas y menos amputaciones.

A mediados de este año el Ministerio de Sanidad ha seleccionado cinco centros de referencia, dos de ellos en Madrid en el Clínico y el hospital Gregorio Marañón, el Virgen del Rocío, Sant Joan de Dios en Barcelona y la Clínica Universitaria de Navarra.

"Con demasiada frecuencia el primer profesional que atiende al paciente no es capaz de identificarlo y esto juega en su contra", ha subrayado.

Esta oncóloga del Gregorio Marañón ha denunciado las "inequidades" existentes entre comunidades autónomas en cuanto al mayor o menor acceso a los fármacos dependiendo de si son pacientes de Cataluña o Andalucía.

Un bulto en partes blandas debería considerarse potencialmente maligno si es superior a 5 centímetros, aumenta de tamaño o produce dolor.

En esos casos hay que acudir al médico y ser remitido a un centro de referencia para ser atendidos por un equipo multidisciplinar integrado por oncólogos, radioterapeutas, traumatólogos y cirujanos, ha insistido.

También María Jesús Ruiz Gómez, miembro de la Asociación Española de Afectados por Sarcomas (AEAS), ha hecho hincapié en la necesidad de concienciar a los profesionales sanitarios, sobre todo a los médicos de familia, de "la posibilidad de encontrarse con un sarcoma", ya que a menudo, "mucho más de lo que nos gustaría", se confunde con otras patologías.

Ante la mínima sospecha, Ruiz ha animado a acudir a la consulta ya que "a veces es mejor ser pesados con los médicos de cabecera para que nos hagan pruebas" aunque luego el resultado sea negativo.

Gaspar Amat, director asociado del departamento de asuntos médicos de PharmaMar, ha constatado la dificultad de realizar investigación sobre este tumor debido a los trámites burocráticos y al escaso número de pacientes que se reclutan para participar en ensayos clínicos, debido a la gran variedad de subtipos.