La industria de la moda tiene un peso muy importante en nuestro país. Según el estudio "El sector textil y el gasto en prendas de vestir en España 2016", elaborado por EAE Business School, en España el número de empresas dedicadas a este sector ascendía a 7.864 en 2016. Por su parte, el gasto medio familiar en prendas de vestir ha aumentado en el último año un 23%, situándose en 612€ por persona y año, lo que supone una facturación de 28.489 millones de euros a nivel nacional, de los cuales 1.035 millones se ingresan en el Archipiélago.

Alguna de las claves de esta industria son la constante renovación de las tendencias y la búsqueda activa de fórmulas innovadoras que permitan crear diseños de vanguardia. Precisamente, una de las prácticas más al alza, desde comienzos de 2015, es la elaboración de prendas de calidad a partir de tejidos fabricados con materiales reciclados, como los envases de tereftalato de polietileno (PET), o productos orgánicos como la naranja o la piña, entre otros.

La apuesta por este nuevo modelo permite reducir los impactos medioambientales que genera una actividad que, según el Instituto de la Moda de Dinamarca, es la segunda más contaminante después de la petrolífera.

Además, al igual que el resto de productos, los textiles también se desechan. Todos los años cada español genera entre 7 y 10 kilogramos de residuos de ropa, lo que supone entre 322.000 y 460.000 toneladas de prendas que van a parar a vertederos o a plantas de reciclaje.

En este contexto, hoy podemos asegurar que cada día los ciudadanos están más concienciados y comprometidos con la sostenibilidad, la cual se va implantando en todos los ámbitos de su vida.

Esta nueva mentalidad hace que, como consumidores, exijan a las compañías que sean corresponsables con el medio ambiente.

En este sentido, las prendas elaboradas con materiales reciclados van un paso más allá, ya que permiten minimizar los impactos medioambientales en mayor medida. Para aumentar la proliferación de este sistema los ciudadanos deben conocer que los envases que depositan en los contenedores de reciclaje pueden convertirse en tejido para la confección de prendas, entre otros muchos productos, como nuevos envases, mobiliario urbano, llantas de bicicletas o cajas de zapatos.

Actualmente existen algunos proyectos que fomentan la denominada "moda verde". Un nuevo concepto que implica una revolución dentro de la industria y que reivindica la ética en todos los procesos de la industria de la moda.

En este marco, Ecoembes, la organización medioambiental sin ánimo de lucro que promueve la sostenibilidad a través del reciclaje de envases en España, emprendió en 2015 un proyecto pionero en nuestro país en el ámbito de los tejidos reciclados. Para ello se alió con la plataforma de moda MFSHOW, con el objetivo de concienciar a los ciudadanos de la importancia del reciclaje a través de la moda y de fomentar el desarrollo y la investigación de nuevos textiles de alta calidad a partir de este tipo de materiales.

De este modo, ambas entidades organizaron el certamen El Laboratorio, dirigido a jóvenes diseñadores y firmas interesadas en la creación de colecciones respetuosas con el medio ambiente y dispuestas a promover la sostenibilidad. El diseñador Moisés Nieto se alzó como ganador, lo que le permitió crear una colección cápsula donde el 80% de los tejidos provenían de envases de plástico de tipo PET. Su versatilidad le permitió confeccionar una amplia propuesta de prendas que incluyó acabados satén, popelín encerado de algodón orgánico, canalé de neopreno, crepé satén y seda. Todos ellos fueron enmarcados en la colección Ecoembes by Moisés Nieto, cuyo hilo conductor fue la silueta sixties en la que se utilizó una amplia gama cromática, donde el color grafito y el verde bronce sirvieron de base contrastando con el naranja Guantánamo y el azul Prusia, utilizados en los detalles. En cuanto a las líneas, transitaba desde un estilo sofisticado y femenino, con minivestidos rectos y faldas evasé, hasta cortes más masculinos y de estilo sport. Las prendas están a la venta en http://www.mfshow.es/tienda y sus beneficios van destinados íntegramente a proyectos de SEO BirdLife para la protección de la biodiversidad en nuestro país.

Tras el éxito de aquella edición, en septiembre se lanzó una nueva convocatoria. En esta ocasión los ganadores han resultado María Clè, reconocida en la categoría de Moda, y la marca de zapatos Etxaburu, que era reconocida en una nueva categoría impulsada este año: Complementos. Ambos se encuentran inmersos en un proceso de creación para hacer realidad sus diseños, que se presentarán el próximo mes de febrero en la pasarela TRESemmè MFSHOW WOMEN en Madrid.

Este nuevo tipo de tejidos reciclados son de alta calidad y permiten producir indumentarias transpirables e impermeables como es el caso de los anoraks, los forros polares o las mochilas. Otra de sus características es su durabilidad, este tipo de hilado de poliéster hace que las prendas tengan una mayor resistencia, y, además, aportan beneficios para la salud ya que protegen la piel de los rayos UVA.

"Con este proyecto queremos dar respuesta a las inquietudes de los ciudadanos, que están cada vez más comprometidos y que buscan el cuidado del medioambiente también en su manera de vestir. Además, la iniciativa pretende abrir una nueva vía de crecimiento económico y social a través de la innovación que apoye a diseñadores que no tengan miedo de asumir retos y establecer las bases de la moda del futuro", ha asegurado Nieves Rey, directora de Comunicación Corporativa y Marketing de Ecoembes.

Poco a poco el número de empresas que apuesta por este tipo de confección va en aumento. Ejemplo de ello es el proyecto Upcycling the Oceans, impulsado por la Fundación Ecoalf con la colaboración de Ecoembes, que elabora productos de moda de alta calidad a partir de la basura que se recoge del fondo marino y que supone el 80% de los residuos que hay en este medio, algo pionero a nivel mundial. Para ello, ambas organizaciones colaboran con barcos pesqueros de arrastre que recogen los residuos para transformarlos en hilo de primera calidad que permita crear tejidos. Así, el proyecto beneficia por partida doble al cuidado del medio ambiente ya que, por un lado, se retiran los residuos favoreciendo el mantenimiento del entorno y, por otro, se evita la extracción de nueva materia prima para la fabricación de prendas y complementos.