Para responder a las necesidades de salud a través de la cobertura sanitaria universal y garantizar la seguridad ante enfermedades altamente infecciosas como el ébola, faltan actualmente 50 millones de empleos de calidad en el mundo en ese sector.

El documento que avala estas afirmaciones se llama "Personal de la salud: Un enfoque basado en la cadena mundial de suministro", y en él la Organización Internacional del Trabajo (OIT) destaca que en los próximos 15 años el envejecimiento demográfico agravará la carencia de profesionales en el sector, por lo que harán falta 84 millones de empleos más.

"La creación de millones de empleos que faltan permitiría mejorar los niveles de vida, el crecimiento económico y el desarrollo, en particular en los países con altos niveles de desempleo entre los trabajadores poco cualificados y desprovistos de servicios de asistencia médica", señaló la directora del Departamento de Protección Social de la OIT, Isabel Ortiz.

En 15 años, debido al envejecimiento demográfico, harán falta 84 millones de empleos más

El informe incluye a todos los trabajadores que contribuyen de alguna manera con la atención médica y la prestación de servicios sanitarios a las cadenas de suministro de la salud en el mundo, tanto dentro de los países como entre ellos. En este tipo de empleo se encuentra sobre todo en las áreas de mantenimiento, limpieza, apoyo administrativo y cuidado informal, señala la OIT.

Estos datos también revelan que, a nivel mundial, una fuerza de trabajo "invisible" de 57 millones de trabajadores no remunerados cubre la "enorme falta" de profesionales de la salud cualificados. El estudio sugiere que se debería tener en cuenta "plenamente" el gran número de personas que trabajan en ocupaciones no sanitarias, sobre todo los trabajadores no remunerados.