Este 29 de diciembre se cumplen 250 años del nacimiento de Charles Macintosh, un químico escocés que revolucionó la industria textil, al inventar la prenda resistente al agua, el impermeable.

La esencia de su patente se fundamentaba en la unión de dos gruesas capas de tela soldadas entre sí mediante otra de caucho (goma natural), conseguido al hacer soluble el caucho con la nafta. Debido a sus numerosos descubrimientos en el área de la química fue nombrado miembro de la Royal Society en 1823.

Charles Macintosh patentó su invento para la ropa impermeable en el año 1823, y la primera prenda impermeable de vestir, que denominó Mackintosh, se convirtió en parte de la producción de lo que sería en el futuro su fábrica textil familiar, denominada Charles Macintosh and Co. of Glasgow. El impermeable Mackintosh se empleó posteriormente en la expedición ártica de Sir John Franklin (1824) y por el ejército británico.

En 1830 la compañía de Macintosh se fusionó con otra del mismo sector textil, propiedad del científico Thomas Hancock en Mánchester. Ambos se conocieron debido a que Hancock también había experimentado con el caucho en los textiles dedicados a prendas de vestir desde el año 1819, fecha en la que creó la fábrica que se uniera a la de Macintosh.