Investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia han obtenido nuevos zumos y yogures enriquecidos con ácido fólico estable y resistente a los cambios de temperatura, luz y pH, lo que permitiría mejorar la bioaccesibilidad y eficacia de esta vitamina, clave en la dieta diaria y en especial para las mujeres en el embarazo.

La clave de este trabajo, a escala de laboratorio, reside en la encapsulación del ácido fólico en micropartículas de óxido de silicio, cuya carga se libera de forma controlada y sostenida al llegar al intestino gracias a la acción de puertas moleculares inteligentes.

El trabajo, cuyas conclusiones han sido publicadas en la revista Food Chemistry, ha sido desarrollado por investigadores pertenecientes al Departamento de Tecnología de Alimentos y al Instituto de Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico de la UPV, según informaron a la agencia Efe fuentes de la institución académica.

Esta vitamina es fundamental para las mujeres durante el embarazo y las partículas podrían servir para evitar la espina bífida en fetos en desarrollo, "sin provocar los posibles efectos secundarios inherentes a la suplementación excesiva con ácido fólico".

El investigador del Departamento de Tecnología de Alimentos, Edgar Pérez, explica que el ácido fólico es una vitamina "deficiente frecuentemente en nuestra dieta por ser muy vulnerable a tratamientos térmicos y al almacenamiento". "Para evitar los problemas asociados al déficit de folatos en la dieta existe una tendencia global de suplementar alimentos o consumir suplementos vitamínicos ricos en ácido fólico sintético", añade.

Según Pérez, "estudios actuales apuntan que la sobredosis de ácido fólico sintético también puede ser un hándicap para la salud. Cuando la cantidad de ácido fólico satura las rutas metabólicas de transformación, se activan rutas secundarias que dan como resultado metabolitos que pueden activar el desarrollo de ciertas enfermedades, como, por ejemplo, cáncer".

Por ello, asegura el investigador adscrito a la Universidad Politécnica de Valencia, la suplementación de ácido fólico "es un arma de doble filo".

El objetivo de los responsables de la iniciativa era obtener una solución que aislara al ácido fólico del medio y que lo liberara de forma controlada y sostenida, evitando así tanto picos de absorción como la degradación de la vitamina. Las partículas de sílice mesoporosa han resultado, así, idóneas.

Según destacan los expertos, controlar la liberación es importante por dos aspectos: dentro del soporte el ácido fólico no es atacado por agentes externos (pH, temperatura o luz), mientras que tampoco puede ser absorbido en el intestino delgado.