Todos somos autodidactas+, es decir autodidactas ampliados, personas que aprendemos todo lo que podemos por nuestros medios y además recurrimos a maestros y a escuelas para que nos enseñen más.

El conocimiento del mundo es actualmente inabarcable. Sin embargo, no es cuestión de todo o nada, se puede aprender mucho sin necesidad de aprenderlo todo. La clave está en seleccionar adecuadamente el qué.

Uno de los temas más interesantes que se pueden estudiar en el mundo de hoy es el relacionado con las grandes cantidades de información. En doce mil años hemos pasado de necesitar unos pocos días para dominar todo el conocimiento del mundo a tener tanta información que es necesario aprender cómo manejarla.

Enormes cantidades de información

Ya se han instalado entre nosotros términos como Big data, Data Scientist, Business Analyst o Social Media Strategist, terminología en inglés que alude al manejo de grandes cantidades de información, de datos. Manejar datos implica muchas acciones distintas: diseñar y construir los dispositivos que los recogen (cámaras, biosensores, transductores en general), programar el software, almacenarlos, organizarlos, filtrarlos, hacerlos accesibles a las plataformas adecuadas, estudiarlos estadísticamente, cruzarlos con datos provenientes de otras fuentes…

¿Dónde hay una cantidad masiva de datos? En todos sitios. En las bases de datos de clientes potenciales, en las de las fichas de entrada y salida de los trabajadores, en las horas en las que están encendidas las luces o los sistemas de climatización, en los kilos de papel, o de gasolina, o de azúcar, que se consumen cada día, o cada hora, en una industria concreta. En todos sitios.

Antes de que existieran las ciencias de los datos (Data Sciences), esa información no se procesaba. Ya sí. Y el abanico de posibilidades que abre la comprensión y el manejo de grandes cantidades de datos dan para formar a distintos especialistas.

Reciclarse y actualizarse

Por muchos años que un profesional lleve trabajando en una empresa, siempre habrá una oportunidad para reciclarse. Se puede aprender más y aportarle a la empresa un grado más de eficiencia y un punto más de modernización y de adaptación a los tiempos que corren.

La Universidad de Alcalá de Henares, por ejemplo, cuenta con especialistas en este campo (doctores en Física, analistas de Big Data) y los ha reunido para organizar un Máster en Data Science. Pensado para profesionales con un perfil técnico (ingenierías TIC), cuantitativo (matemáticas, estadística) o de negocio (economía, empresa) que deseen afrontar el reto de Big Data como ventaja competitiva, especializándose en el análisis de datos.

Cuenta también con módulos de adaptación, de introducción a la programación, para quien nunca haya programado y de introducción a la estadística para aquellos que hayan olvidado parte de los conocimientos que adquirieron en la carrera.

Los módulos de los que consta el Máster son accesibles online o semipresencial, lo que se ha dado en llamar Flipped Classroom (aula invertida, donde parte del contenido se hace en el aula y otra parte está disponible en la red) y se pueden compatibilizar con el trabajo y las ocupaciones familiares. Utilizan un método docente basado en la práctica y la contextualización en casos prácticos o en problemas de negocio, utilizando las herramientas y tecnologías de manera práctica desde el principio.

Tienen ayudas al estudio y facilitan la financiación del curso, que por cierto dura aproximadamente lo mismo que un curso lectivo de la universidad: desde noviembre de 2017 hasta julio de 2018.

Aprende, aprende y sigue aprendiendo

Hay que aprender por muchos motivos: porque en los genes de todos los seres vivos está escrito que aprender significa tener más capacidad para sobrevivir. Porque incrementa la autoestima. Porque ser un profesional es bueno, pero ser un profesional actualizado es todavía mejor.

Vivimos un momento con unas condiciones excelentes para acceder a formaciones de calidad. Es fácil desplazarse, pero más fácil aún es conectarse a los contenidos. Se pueden encontrar buenos profesionales y lo que es más, estar en contacto con ellos de forma prácticamente individual. Y tenemos las herramientas necesarias para buscar y seleccionar las materias sobre las que queremos aprender más de lo que ya sabemos.

Como decía Miguel de Unamuno: renovarse o morir.