Las islas Cíes, en la ría de Vigo, se han erigido en uno de los destinos más demandados por los millones de visitantes que se acercan a Galicia. Pese a ser Parque Nacional, este espacio se ha visto afectado por una masificación que ha desatado la polémica.

El archipiélago, compuesto por las islas de Monteagudo, Faro y San Martiño, y los islotes de Boeiro, Penela dos Viños, Carabelos y Ruzo, ofrece servicios como itinerarios guiados, cámping u observatorios de aves, y una de sus playas llegó a ser considerada por el periódico británico The Guardian como una de las mejores de Europa.

La controversia estalló el pasado fin de semana, cuando unas 2.000 personas vieron frustrada su visita al superarse el cupo de 2.200 turistas y 800 campistas al día, a pesar de haber adquirido previamente un billete a través de las navieras que ofertan la ruta.

La Xunta justificó lo ocurrido apelando a "infracciones" de las empresas navieras en lo que respecta al cumplimiento del cupo de visitantes establecido en 1994, que está gestionado a través de una central de reservas que emite las autorizaciones. El Gobierno explicó que los días 3 y 5 de este mes ya se detectaron "excesos de cupo", que derivaron en la apertura de expedientes sancionadores.