El año 2017 acabará con el mayor número de grandes incendios (aquellos que arrasan más de 500 hectáreas) del último decenio, un total de 53, y con seis personas muertas a causa de las llamas, la cifra más alta de los últimos cinco años.

La última estadística del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, con datos hasta el 30 de noviembre, revela que durante este ejercicio han ardido 176.587 hectáreas, una cifra que duplica la media de los últimos diez años.

A falta de dos días para concluir el año, seis personas han fallecido a causa de este tipo de siniestros; la primera fue en mayo en un incendio en Zamora y la segunda en septiembre en Gran Canaria. Los incendios forestales no habían causado un número de víctimas tan elevado desde el año 2012, cuando las llamas se cobraron 11 vidas.