La Comisión Provincial de Policía Judicial acordó en su última reunión anual establecer un protocolo de actuación para el levantamiento de cadáveres. De forma concreta, el objetivo de esta medida es que los médicos de los centros de salud o de las ambulancias perfeccionen su procedimiento de intervención en esta materia para detectar las muertes naturales.

Este planteamiento se realiza por parte de las autoridades judiciales, fiscales y de agentes de la Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Autonómica a raíz de que "se haya constatado un número muy importante de muertes naturales que no se certifican como tales por los facultativos de las ambulancias o centros de salud, lo que conlleva judicializar del caso", según señaló una de las fuentes consultadas. Esta circunstancia conlleva una dilación en la entrega del cuerpo a los familiares y un grave quebranto para estos. El citado órgano sugiere que los médicos hablen con familiares para conocer antecedentes médicos del fallecido, las circunstancias en las que murió o dispongan con celeridad del expediente clínico, entre otras cosas. Es decir, que el facultativo pueda analizar el caso antes de excluir que hubo muerte natural.

La Comisión de Policía Judicial también acordó que la muestras de ADN recogidas a delincuentes se introduzcan a la mayor brevedad posible en la base de datos denominada Codis, para que, si existen coincidencias, se pueda perseguir o detener a dicha persona por uno o varios delitos. Pueden ser recogidas por agentes, forenses de los juzgados o de institutos de toxicología, por ejemplo.