El tamaño medio de los tumores de mama en el momento del diagnóstico, que se redujo drásticamente en los años 80 y 90 con la introducción de los programas de cribado, está volviendo a crecer, según un estudio que se ha presentado hoy en el 11º Congreso Europeo de Cáncer de Mama, que se celebra en Barcelona.

Los autores del estudio han explicado en rueda de prensa que aún no saben si ese incremento reciente del tamaño de los tumores conducirá necesariamente a un aumento de las muertes por cáncer de mama en los próximos años.

El trabajo ratifica que, en general, las mujeres con tumores más pequeños en el momento del diagnóstico presentan mejores oportunidades de sobrevivir a la enfermedad.

La investigación ha sido liderada por la médico residente Manon Jenkins y los cirujanos Louise Merker y Nicholas Gallegos, todos ellos del Hospital General Weston en Bristol (Reino Unido).

Según ha explicado en la rueda de prensa la doctora Jenkins, "los cribados buscan detectar los tumores de mama antes de que sean lo suficientemente grandes como para que la paciente los note y así, con el cribado, también tiene que descender la mortalidad".

El estudio analizó 386.454 casos de pacientes en Estados Unidos a las que se había diagnosticado cáncer de mama entre 1983 y 2014.

Los investigadores seleccionaron a las mujeres en función del año en que fueron diagnosticadas y de su edad en ese momento.

Los resultados muestran que el tamaño medio del tumor se redujo un 23 % a lo largo de los 32 años analizados, de 26 a 20 milímetros, pero esta tendencia no fue constante a lo largo de todos los años y variaba en función de la edad de las mujeres.

Cuando se introdujo el cribado de mama, a principios de los años 80, el tamaño medio de los tumores de mama descendió considerablemente.

En las mujeres de entre 70 y 74 años, el trabajo constató una reducción media del 27 %, pero en las mujeres de más de 84 años, esa reducción fue solo del 10 %.

El tamaño medio del tumor en las mujeres de avanzada edad, en las que los cribados son menos probables, sigue siendo el más alto.

Sin embargo, del 2001 al 2014, los investigadores han hallado un aumento inesperado del tamaño medio del tumor de entre el 3 % (en el grupo de edad de 75 a 79 años) y el 13 % (en las mujeres de entre 50 y 54 años).

"Los índices de supervivencia al cáncer de mama han ido mejorando de manera estable gracias a la introducción de los cribados y a la mejora de los tratamientos. Lo que no sabemos es cuál de estos elementos ha desempeñado el papel más importante en la mejora de la supervivencia", ha dicho Jenkins.