El Gobierno ha asumido el compromiso de generar "marcos jurídicos, sociales y normativos" para acabar con el estigma y la discriminación que aún padecen las personas con VIH con la firma de un pacto social. Se trata del Pacto Social para la no Discriminación e Igualdad de Trato, que los ministros de Sanidad e Interior, María Luisa Carcedo y Fernando Grande-Marlaska, respectivamente, presentaron ayer.

El pacto incluye asegurar que los certificados médicos no incluyan el estado serológico como un indicador del padecimiento de enfermedad infecto contagiosa; ampliar las garantías de protección legal; la promoción de políticas para evitar la discriminación laboral; garantizar el acceso a las técnicas de reproducción asistida y a la adopción; así como favorecer la libre circulación de personas con el VIH y con sida.