El nacimiento de Liam primero se adelantó y, cuando parecía que ya había llegado el momento, "se hizo de rogar". Al final, el resultado de la premura inicial y la tardanza posterior lo convirtió en el primer bebé nacido en 2019 en los hospitales públicos tinerfeños. Pesó 2.750 gramos y su alumbramiento, natural, se produjo a las 6:23 horas en el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria.
A mediodía de ayer, su feliz mamá, Cecilia Castillo, explicó que el parto estaba programado para el próximo 9 de enero. "Lo único es que vine a una consulta y me dijeron: Pues aquí te quedas", detalló con desparpajo. Ella hubiese preferido en ese momento regresar a su casa para "planificar" la llegada del que es su tercer hijo, tras Nayara -de nueve años- e Isabella -de 22 meses-. "Anoche se hizo de rogar un poco, no quería salir... Dijo: No, yo quiero el 9 de enero", apuntó
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Cecilia, de 30 años, relató que el parto fue "superbien". "Ahora mismo me siento mejor; un poco cansada, porque no he dormido lo suficiente, pero bien, contenta, feliz de que mi hijo vaya a ser un poquito famoso", bromeó ante la presencia de varias cámaras de televisión, fotógrafos y periodistas en su habitación. Sin perder el buen humor, también expresó que tiene claro que será su último hijo: "Estamos plantados ya; al padre ya lo mandé yo a que se plante".
"Es chiquitito, pero ya crecerá fuera, como me dicen los médicos", señaló la madre, antes de indicar que la hermana mayor está deseando conocerlo y que alberga algunas dudas sobre cómo lo recibirá la más pequeña. "Es original", respondió al ser preguntada por el nombre, decidido por el padre, Washington Pereira, de 40 años. "Esta vez se lo dejé yo a él porque siempre lo he elegido yo", manifestó la madre, acompañada en la mañana de este martes por los abuelos, que, como no podía ser de otra forma, se mostraron felices con el nacimiento de su nuevo nieto.