El Registro Central de Delincuentes Sexuales impidió el año pasado que 505 personas condenadas por delitos de ese tipo pudieran trabajar o ejercer una actividad con menores, cifra que se suma a los 1.110 casos que frenó entre 2016, cuando entró en vigor, y 2017, lo que supone un total de 1.615. Canarias es la quinta comunidad autónoma con más personas inscritas en este registro, 2.507.

Según los datos facilitados a Efe por el Ministerio de Justicia, a lo largo de 2018 el Registro emitió 1.994.375 certificados y en 505 casos, el 0,03% del total, el resultado fue positivo, es decir, la persona estaba inscrita por una condena firme por delitos sexuales.

El Registro de Delincuentes Sexuales tiene inscritos a más de 45.000 condenados

Presentar un certificado que pruebe que no se está en esa base de datos, según se estableció en la Ley de Protección a la Infancia y la Adolescencia, es necesario para acceder a puestos de trabajo que impliquen un contacto habitual con menores, como profesores, monitores, entrenadores, personal de comedores o conductores de autobuses escolares,

A 31 de diciembre de 2018, el Registro recogía la identidad y el perfil genético (el ADN) de 45.864 personas, 5.082 más que el día en el que se activó, en marzo de 2016.

En él están inscritos los condenados por agresión, abuso y acoso sexual, exhibicionismo y provocación sexual, prostitución, explotación sexual y corrupción de menores.

El punto más controvertido y que ha sido objeto ya de varios procesos judiciales es la dificultad de borrar una inscripción, ya que cuando la víctima del delito fue menor de edad y el condenado mayor solo pueden cancelarse los datos cuando hayan transcurrido treinta años, a contar desde el día en el que se considere cumplida le pena.