Al menos 29 personas han muerto y otras 19 están dadas por desaparecidas en Filipinas tras el paso del tifón "Cham-hon", que ha ocasionado además heridas a decenas de personas.

La mayoría de las víctimas fallecieron a causa de los deslizamientos de tierras provocados por las fuertes lluvias, ahogadas o golpeadas por objetos arrastrados por el fuerte viento, según datos de Defensa Civil.

La televisión local "GMA" señaló que se produjeron trece muertes en la provincia de Pangasinan y once en Ifugao, mientras que en las de Zambales, La Unión, Bataan, Cagayan y Nueva Vizcaya, todas en la isla de Luzón, se produjeron una en cada una.

Los daños ocasionados por el fenómeno atmosférico a la agricultura y las infraestructuras ascendieron a 379 millones de pesos (unos ocho millones de dólares ó seis millones de euros), según datos preliminares del Consejo Coordinador Nacional para Desastres.

El tifón, que ha perdido fuerza en las últimas horas y bajado de categoría hasta tormenta tropical, afectó a más de 64.000 personas y ocasionó daños en unas 7.000 viviendas, de los que más de 2.800 han sido considerados totalmente destruidos.

La semana pasada, "Kujira", el primer huracán de la temporada en Filipinas, causó 27 muertos, 236.892 personas damnificadas y pérdidas materiales por valor de 573 millones de pesos (unos 12 millones de dólares o 8,9 millones de euros).

Unos 20 ciclones visitan el archipiélago filipino durante la estación de las lluvias, que arranca entre mayo y junio y se prolonga hasta octubre o noviembre.