Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han procedido a la desarticulación de un entramado delictivo conformado por cuatro supuestos empresarios, que se venían dedicando desde hace dos años a estafar a extranjeros indocumentados en las islas de Gran Canaria y Fuerteventura, y otras cuatro personas que actuaban como intermediarios entre los "empresarios" y estos últimos, así como una gestora que se encargaba de tramitar las solicitudes de trabajo y residencia.

Esta operación venía desarrollándose desde el pasado mes de octubre de 2008, permaneciendo abierta a día de hoy, iniciándose tras detectar la Subdelegación del Gobierno de Las Palmas varias irregularidades en las ofertas de empleo a extranjeros, presentadas por el titular de una empresa del sector ganadero en el sur de Gran Canaria.

Dicha persona, el llamado Enrique A. L., de 56 años, natural de Las Palmas, presentó en un corto periodo de tiempo hasta un total de ochenta solicitudes de residencia y trabajo para extranjeros de múltiples nacionalidades, que se encontraban tanto en territorio nacional como en sus países de origen, lo que hizo sospechar a dicha Subdelegación que podía tratarse de una empresa "pantalla" con el único objetivo de obtener permisos de residencia para extranjeros sin papeles.

Las sospechas se convirtieron en realidad tras comenzar las investigaciones funcionarios adscritos a la Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedad (UCRIF), de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Las Palmas, quienes, una vez oyeron en declaración a varios de los extranjeros, averiguaron que estos debían pagar la cantidad de seiscientos euros a cambio de la oferta de empleo, abonando al "empresario" igualmente otros doscientos euros más en concepto de alta a la Seguridad Social si la solicitud del permiso resultaba favorable.

Estos "empresarios" habrían presentado de forma fraudulenta más de 300 solicitudes de permiso y residencia para ciudadanos extranjeros en dos años.