La Audiencia de Sevilla ha condenado a 12 años y tres meses de cárcel a un hombre que atropelló a su esposa con su coche, con intención de matarla, además de someterla a continuos actos de maltrato durante su convivencia.
La abogada Amparo Díaz Ramos, que ejerció la acusación particular, ha informado de que la Sección Cuarta de la Audiencia ha considerado demostrado un delito de homicidio en tentativa, por el que impone al acusado R.R.G. nueve años y medio de cárcel, y otro de violencia doméstica habitual, con una condena de dos años y nueve meses.
Durante el juicio, el acusado negó el intento de homicidio y explicó el atropello como un accidente de tráfico, pero tanto la víctima como un testigo presencial confirmaron los hechos.
El acusado y su esposa P.C.F. discutieron en el interior del coche, la mujer salió huyendo hacia un terraplén y en ese momento el acusado puso en marcha el motor y la alcanzó, según el testimonio de la víctima.
En el mismo sentido se expresó un testigo presencial, quien relató que el coche del acusado rebasó a la mujer en su huida, por lo que dio marcha atrás y la atropelló.
La mujer salió volando unos dos metros y cayó violentamente al suelo, por lo que sufrió fractura de dos vértebras y un traumatismo hepático por los que estuvo 24 días hospitalizada, además de requerir 189 días hasta su curación.
La sentencia impone además al acusado dos años y nueve meses por someter a su esposa a malos tratos de palabra y de obra durante su relación de varios años, durante la cual tuvieron cinco hijos.
La mujer presentó varias denuncias pero siempre acababa retirándolas, y entre 2004 y 2006 quedó ingresada, durante periodos de tiempo variables, en Casas de Acogida de las ciudades de Huelva, Sevilla y Córdoba.
El intento de homicidio ocurrió el 15 de abril de 2008, cuando la pareja dejó a sus cuatro hijos mayores en la parada del autobús escolar y, en compañía de un bebé de siete meses, se subieron en el coche del acusado para "dar una vuelta" por la autovía A-8009 Sevilla-La Rinconada.
El acusado se metió por un camino perpendicular, detuvo su vehículo marca BMW y "de forma sorpresiva" sacó de la guantera un destornillador, que intentó clavar en el pecho a su compañera, que se encontraba sentada en el asiento trasero con el bebé.
La mujer salió del coche e intentó huir hacia un terraplén, momento en el que el acusado puso en marcha el coche y "aceleró a gran velocidad" dirigiéndolo contra la víctima.