Las autoridades de Madeira informaron hoy del rescate de otro cuerpo que sitúa en 42 los muertos por las inundaciones del pasado sábado en la isla, donde ha vuelto a llover y fueron desalojadas algunas familias de zonas de riesgo.

El alcalde de Funchal, Miguel Albuquerque, dijo que el cadáver recuperado hoy es el de una persona dada por desaparecida en su ciudad, la capital del archipiélago portugués, donde han perecido en total 32 de las víctimas de la tragedia.

El Gobierno regional de las islas había anunciado ya el pasado domingo que en las inundaciones habían muerto 42 personas pero aclaró el martes, tras el hallazgo de varios cadáveres sin que se actualizara la cifra total, que los cuerpos encontrados hasta entonces eran sólo 39.

Las autoridades aseguraron que habían hecho una "estimación" superior de víctimas porque había cuerpos "señalizados" y que el balance final podía ser aún mayor.

Albuquerque indicó que 28 familias de los barrios de Monte y Santo Antonio, muy afectados por las riadas del sábado, habían sido desalojadas de sus casas ante las lluvias y el fuerte viento que se esperan esta noche en la isla.

Madeira, como la península Ibérica, de cuyas costas dista 860 kilómetros, va sufrir nuevas lluvias durante el fin de semana, aunque los servicios lusos de meteorología pronostican que no serán de la intensidad que causaron las riadas de la semana pasada.

Protección Civil de Portugal ha puesto en alerta a casi todo el territorio continental luso por la posibilidad de fuertes lluvias y vientos de hasta 160 kilómetros por hora.

En Madeira, las autoridades tuvieron hoy en la calle más de 350 vehículos pesados para acabar de despejar y limpiar las áreas con riesgo de inundación.

Las torrenciales precipitaciones que registró el sábado pasado la isla durante casi 15 horas, las más intensas en las últimas cuatro décadas, causaron grandes riadas que descendieron de los cerros, en Funchal y otras zonas de la isla, y se llevaron personas, automóviles o casas enteras y destrozaron calles y carreteras.

Según los cálculos confirmados hoy por el Gobierno regional, además de los 42 muertos, aún hay 16 personas desaparecidas tras el temporal y alrededor de 600 desalojadas de sus viviendas.

La portavoz del Gobierno madeirense, Conceicao Estudante, alertó a la población sobre las previsiones de lluvias y recomendó "prudencia y atención a los riesgos".

Estudante informó de que el secretario de Finanzas del Gobierno de Madeira, representantes del Gobierno nacional luso y el comisario europeo de Política Regional, Johannes Hahn, analizaron hoy en Brujas la posible ayuda a la isla de la Unión Europea.

Según el Ministerio del Interior luso la dimensión de la catástrofe, a pesar de que todavía no hay estimaciones cerradas sobre las pérdidas, "justifica" el apoyo de la UE.

El presidente del Gobierno regional de Madeira, Alberto Joao Jardim, cree que los estragos del temporal superan los 1.000 millones de euros, cifra superior al presupuesto anual de todo el archipiélago.

"Sospecho que es necesario un nuevo presupuesto para reconstruir todo esto", agregó Jardim al destacar que las pérdidas se concentran sobre todo en Funchal y Ribeira Brava, a 25 kilómetros de la capital.

Pese a la destrucción causada por las torrenciales lluvias Madeira recuperó en los últimos días la mayoría de sus actividades normales.

Se reabrieron muchas escuelas, fueron reparadas la mayoría de las vías de comunicación cortadas y se restablecieron, según las autoridades, en prácticamente toda la isla los servicios de electricidad, teléfono y agua potable.