Comerciantes y empresarios del barrio costero de San Andrés, en el municipio de Santa Cruz de Tenerife, llevan varias semanas sufriendo una oleada de robos con fuerza por parte de varios individuos. Las víctimas de dichos delitos han sido los propietarios de diferentes locales de hostelería y de tiendas de alimentación.

Uno de los últimos sucesos de esas características tuvo lugar durante la mañana de ayer en la avenida marítima del pueblo marinero. Los ladrones reventaron la puerta de una conocida hamburguesería de la zona y se llevaron la caja registradora.

Supuestamente, la cantidad de dinero que robaron los autores no fue excesiva, ya que no superó los 100 euros.

Para acceder al interior del local comercial, los responsables del hecho delictivo rompieron el cristal de la puerta principal del negocio con un objeto contundente.

El incidente se produjo concretamente a la altura de la parada de guaguas a una hora en la que no suele haber nadie en la vía pública. Unos transeúntes descubrieron que la cristalera del establecimiento estaba rota y decidieron avisar a la Policía Local a las 6:00 horas.

Una patrulla de agentes municipales se desplazó hasta el lugar del robo y se encargó de custodiar el establecimiento hasta que se pudo localizar a los dueños.

Supuestamente, los propietarios fueron informados del mencionado robo con fuerza a las 7:30 horas de la mañana.

La hamburguesería permaneció cerrada hasta primeras horas de la tarde de ayer.

Para evitar otras acciones vandálicas, los dueños colocaron una tabla de madera para tapar el hueco en el cristal.

Agentes destinados en la Brigada de Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía se desplazaron a mediodía de ayer hasta el mencionado local, con el objetivo de hallar huellas u otros indicios que contribuyan a identificar, localizar y capturar a los autores del mencionado delito contra la propiedad.

Sin embargo, éste no fue el único establecimiento asaltado por los ladrones durante la madrugada de ayer.

Fuentes vecinales explicaron que otros dos establecimientos sufrieron robos. Uno de esos negocios fue una frutería situada en el centro del barrio.

A tales casos hay que añadir un robo con fuerza sufrido por el bar Monterrey hace aproximadamente un mes.

Más recientemente, una segunda hamburguesería ubicada en la misma calle que la asaltada ayer sufrió la visita de los ladrones hace un par de semanas.

Los ciudadanos consultados por EL DÍA explican que los robos supuestamente no han sido cometidos por profesionales y en algunas ocasiones se han aprovechado de las escasas medidas de seguridad adoptadas por los propietarios de los comercios afectados.