Una mujer de 55 años ha fallecido en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla como consecuencia de un golpe de calor, ha informado hoy la Consejería de Salud.

La mujer murió la pasada madrugada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro hospitalario sevillano, donde había ingresado el pasado lunes afectada por un fallo multiorgánico, consecuencia de las altas temperaturas de los últimos días y la falta de aislamiento adecuado en su vivienda.

La Consejería de Salud ha recordado que el golpe de calor es un síndrome grave que se produce por un fracaso de la termorregulación por la exposición a unas altas temperaturas, que provocan que el organismo no sea capaz de controlar la temperatura corporal, de forma que la fiebre sube a más de 41 grados.

Los síntomas que hay que tener en cuenta, junto a la temperatura del cuerpo, son la alteración de la conciencia y la deshidratación.

Ante la aparición de un golpe de calor, ha informado la Consejería, es preciso solicitar asistencia médica urgente, y, mientras ésta llega, hay que colocar a la persona afectada en un entorno fresco y enfriarla con aire o agua fría, ya sea con una ducha, un baño o mojando sus ropas.

Los deportistas, trabajadores expuestos al calor, bebés, personas mayores, discapacitados o enfermos crónicos son especialmente sensibles a las altas temperaturas.

Desde la Junta se insiste en la importancia de evitar la exposición a las altas temperaturas, ya que pueden suponer una agresión importante para el organismo, por lo que como medida preventiva aconseja no hacer ejercicio en las horas centrales del día, permanecer en sitio fresco, a la sombra, y beber agua de forma abundante.