Más de cien personas fueron detenidas o imputadas en una redada de la Policía Nacional contra la pornografía infantil en toda España. En concreto, en la operación fueron arrestadas 57 personas (once de ellas pasaron a disposición judicial) e imputadas otras 47. En la operación participaron 400 agentes, que practicaron 97 registros en toda España con la intervención de más de 70 juzgados de guardia y secretarios judiciales. Un detenido y un imputado fueron localizados en Las Palmas.
Uno de los apresados es un productor de material pornográfico infantil que, además de poseer y distribuir archivos de este tipo, grabó imágenes de dos familiares menores, de siete y catorce años en actitud sexual. Dicho individuo, de profesión jardinero y con elevados conocimientos informáticos, guardaba dichas imágenes en soportes que contenían otros vídeos pedófilos de extrema dureza.
Entre los implicados hay también policías locales, ingenieros informáticos, directores de empresa, estudiantes, desempleados, pizzeros o caldereros.
Los policías, pertenecientes a 36 plantillas del Cuerpo, coordinados por la Brigada de Investigación Tecnológica (BIT), intervinieron 328 discos duros, 40 ordenadores portátiles, 21 CPU''s, dos notebook, centenares de dvd''s y cd''s, 13 pendrives y ocho tarjetas de memoria.
Para escudriñar la red e identificar a los usuarios que compartiesen y distribuyeran archivos a través de las redes de intercambio "peer to peer", los agentes usaron por primera vez el software NordicMule, desarrollado por el Servicio Nacional de Investigación Criminal de Noruega. Este sofisticado programa permite realizar las descargas sin compartir el contenido de los archivos descargados, seleccionar el país en el que se ubican los usuarios investigados y, además, visualizar de modo gráfico la información relativa a usuarios que están compartiendo en ese momento los archivos investigados. Tras la solicitud de descarga, el programa crea automáticamente una tabla en el que quedan reflejados todos los datos necesarios para llevar a cabo la identificación de los usuarios investigados. Con las posibilidades de esta herramienta, los policías introdujeron en la aplicación 857 enlaces "p2p", correspondientes a vídeos de contenido ilícito y obtenidos gracias a la colaboración ciudadana mediante denuncias de particulares en Comisarías. En el transcurso de la investigación fueron analizados más de 20.000 conexiones y se seleccionó sólo a aquellas de usuarios que se hubiesen descargado los archivos ilícitos con un nombre que aludiera específicamente a material pornográfico infantil.