Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido en Elche (Alicante) a ocho personas acusadas de proporcionar contratos falsos de trabajo con el fin de facilitar el trámite de obtención de permisos de residencia o cobrar prestaciones por desempleo, según ha informado en un comunicado la Comisaría Provincial alicantina.

La investigación fue iniciada hace varios meses por la Brigada Provincial de Extranjería, Documentación y Fronteras-UCRIF de Alicante, quienes tuvieron conocimiento de la existencia en Elche (Alicante) de un locutorio regentado por ciudadanos marroquíes, donde presuntamente se facilitaban contratos falsos de trabajo a ciudadanos extranjeros, con el fin de facilitar el trámite para la obtención de permisos de residencia o bien para cobrar prestaciones por desempleo.

Tras una ardua investigación, los agentes corroboraron la veracidad de sus sospechas, pudiendo saber que las ofertas de trabajo presentadas en la Tesorería General de la Seguridad Social así como en el Instituto Público de Empleo Estatal, no se correspondían con las personas que efectivamente desempeñaban el puesto de trabajo en el locutorio, y llegaron a la conclusión de que varias personas habían sido dadas de alta en la Seguridad Social a través de contratos falsos o simulados, logrando finalmente la obtención o renovación del permiso de residencia o en otros casos, el cobro de prestaciones por desempleo.

PAQUETES DE TELEFONÍA

Los policías también averiguaron que el locutorio estaba siendo utilizado, supuestamente, por los delincuentes para vender paquetes de teléfonos de alta gama, conseguidos por particulares o empresas que daban de alta numerosas líneas de teléfono, y conseguían de regalo promocional a muy bajo precio y en algunos casos sin cargo alguno, teléfonos móviles de última generación, valorados en algunos casos en cerca de 800 euros, con la intención posteriormente de no abonar los cargos mensuales.

Además, los responsables presuntamente vendían también tarjetas prepago de compañías telefónicas, sin facilitar datos del cliente, que eran muy cotizadas por parte de delincuentes, quienes pagaban altas cantidades de dinero por ellas, ya que hacía imposible su identificación y se garantizaban la impunidad en caso de cometer algún delito.

Los investigadores establecieron un dispositivo de control en torno al locutorio y lograron la detención de seis miembros de la banda, entre los que se encontraba el máximo responsable del grupo.

Se practicó un registro domiciliario en la vivienda del presunto cabecilla, anexa al locutorio, donde se intervinieron 175 paquetes de telefonía móvil, cerca de 1.000 tarjetas de telefonía prepago, dos ordenadores, material informático y unos cinco mil euros en efectivo.

Por el momento, los investigadores han comprobado que cinco personas habían cobrado prestaciones por desempleo y otras cinco habían obtenido la residencia en España por medio de contratos simulados. La investigación policial continúa abierta, por lo que no se descartan nuevas detenciones.