Un equipo de investigación de la Guardia Civil desplazado desde Madrid ha reconstruido hoy las circunstancias en las que se produjo el accidente sufrido por el torero José Ortega Cano, que costó la vida al ocupante de otro vehículo, en el mismo punto de la carretera A-8002 donde ocurrió hace nueve días.

La reconstrucción del siniestro, registrado en la noche del sábado 28 de mayo entre las localidades sevillanas de Burguillos y Castilblanco de los Arroyos, lo ha llevado a cabo esta tarde en el kilómetro 28 de la A-8002 un equipo de Tráfico de la Guardia Civil que se ha trasladado expresamente desde Madrid, según pudo comprobar Efe.

Esa tarea ha durado alrededor de una hora y en ella han participado un teniente y dos guardias civiles, mientras que otros agentes han regulado el tráfico y, en algunos momentos, cortado totalmente la vía, para facilitar la realización de las pruebas y mediciones, tanto en la calzada como en el arcén.

El equipo de investigación, que llevaba el atestado inicial levantado por la Guardia Civil tras el accidente, ha realizado distintas pruebas sobre la vía, tanto de medición de las señales de frenada dejadas por los neumáticos, como de las diversas distancias en la calzada y de las posiciones en las que quedaron ambos vehículos.

Para ello, los agentes han utilizado un patrullero de la Guardia Civil, que simulaba ser el que conducía Carlos P.C., el hombre de 48 años fallecido, y un vehículo monovolumen, para reconstruir los movimientos que hizo el todoterreno de Ortega Cano.

El accidente ocurrió en torno a las 22.30 horas del sábado 28 de mayo en el kilómetro 28 de la carretera A-8002, que une Sevilla con Castilblanco de los Arroyos, por la colisión frontal entre ambos vehículos.

En él falleció Carlos P.C., un vecino de Castilblanco que se dirigía en ese momento a su trabajo en un hotel de Sevilla, mientras que el torero sufrió graves heridas y, tras ser sacado de entre los hierros por los bomberos, fue trasladado urgentemente por el 061 al Hospital Virgen Macarena de la capital andaluza.

Además, un tercer coche resultó implicado -aunque su conductor salió ileso- cuando colisionó con los restos del motor de uno de los vehículos implicados, que quedaron esparcidos por la carretera.

Ortega Cano, que se dirigía a su finca Yerbabuena en Castilblanco de los Arroyos después de haber dejado a su hija en casa de una amiga, continúa ingresado en la unidad de cuidados intensivos de dicho hospital y, según el último parte médico facilitado hoy, su estado de gravedad persiste, sin que haya habido "cambios evolutivos reseñables".