El juicio con jurado contra M.M.C.C., acusado de asesinar el 7 de enero de 2007 a un hombre en Los Realejos (Tenerife), celebró ayer su tercera sesión, en la que declararon diversos testigos con cuyo testimonio se intentaba aclarar dónde se encontraban los implicados el día de los hechos.

Entre las declaraciones prestadas ayer destacó la del hombre en cuyo domicilio dijo el acusado que estaba en el momento en que se cometió el crimen. El motivo por el que llamó la atención este testimonio fue porque contradijo lo declarado el primer día de juicio por el procesado.

Según M.M.C.C. el día de los hechos había acudido al Puerto de la Cruz porque había quedado para cenar con unos amigos. Horas antes de acudir a la cita fue a casa de la víctima, donde compró y consumió sustancias estupefacientes.

El acusado aseguró que tras finalizar la cena llamó a un amigo para dormir en su domicilio, lugar en el que se encontraba en el momento en que se cometió el crimen.

Por su parte, el joven en cuyo domicilio supuestamente se quedó a dormir declaró ayer que habló con el procesado por la mañana, y que este llegó al Puerto de la Cruz en las horas del mediodía, momento en que se encontraron, compraron un bocadillo y fueron a la playa.

En horas de la tarde, relató el testigo, que coincidió con el procesado en la prisión de Tenerife II, dieron un paseo por la zona turística del municipio y fueron al domicilio de este, lugar del que no salieron más, salvo para cenar "un bocadillo" poco tiempo.

Cabe destacar que el testigo, preguntado por el magistrado de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife, aseguró al jurado popular que ese día él estuvo con el acusado "todo el tiempo".

Cabe señalar que la primera vez que la Policía tuvo conocimiento de esta declaración fue en septiembre de 2010, cuando estando en prisión el joven fue llamado a testificar sobre este asunto.

Este testimonio también contradijo los de los tres jóvenes con los que, supuestamente, cenó M.M.C.C., esa noche.

Los tres testigos, que también declararon en el día de ayer, aseguraron que el acusado llegó a la pizzería donde habían acordado sobre las 21:30 horas solo y permaneció con ellos hasta cerca de las 23:30 horas, momento en que se despidió de ellos y dijo que no regresaría a la capital tinerfeña, pues dormiría en casa de un amigo.

En la sala del Palacio de Justicia de Santa Cruz de Tenerife también prestaron declaración algunas de las personas que vieron, sobre las 19:30 horas, a la víctima en la zumería que era de su propiedad y que estaba ubicada en el Puerto de la Cruz.

Según estos testigos, el fallecido mantuvo una discusión con dos indigentes conocidos en el municipio norteño porque no le gustaba su presencia en su local.

La madre del procesado también prestó declaración en la tercera sesión del juicio de jurado popular, la cual, entre lágrimas, aseguró que su hijo no era una persona agresiva y que la expareja de él acudió meses más tarde del asesinato al domicilio amenazándolo de que si no se hacía cargo del hijo que, supuestamente, esperaba, "le buscaría la ruina y le implicaría en un asesinato".

El juicio contra M.M.C.C. celebrará hoy su cuarta sesión en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife. Para esta jornada está previsto que presten declaración los peritos forenses.