La Policía ha recuperado once de las piezas de arte barroco que fueron robadas hace un año de la ermita de la localidad soriana de Castilruiz y las ha entregado hoy al Obispado de Osma-Soria.

Los lienzos y tallas permanecerán en el depósito diocesano mientras se resuelve el juicio abierto contra las cuatro personas imputadas por el robo de estas obras de arte, según ha señalado el responsable de Patrimonio de la Diócesis de Osma-Soria, Juan Carlos Atienza.

El jefe de la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía, Antonio Tenorio, ha señalado ha sido posible recuperar las obras de arte, excepto dos cuadros del siglo XVIII que, en su opinión, "no están muy lejos del círculo donde se han recuperado las demás".

A preguntas de los periodistas, Tenorio ha destacado que Castilla y León es la comunidad autónoma más afectada por los expolios, aunque ha subrayado que es un delito que va a menos, con la rehabilitación de museos y las recuperaciones de piezas.

La ermita de la Virgen de los Ulagares, en Castilruiz, sufrió este expolio en febrero de 2010, cuando los ladrones se apoderaron de trece piezas de arte barroco, entre ellas cuatro lienzos y cuatro tallas de cierta calidad artística.

Las alarmas activadas por el santero cuando dio por terminada su custodia y las verjas no fueron impedimento para los ladrones, dado que la ermita se encuentra a más de dos kilómetros del pueblo.

Los controles realizados por la Brigada de Patrimonio Histórico permitió localizar una de las obras pictóricas ya restaurada -un "Ecce Homo"- el pasado 13 de abril, en la caseta de un anticuario de Ocaña (Toledo) en la Feria de Almoneda celebrada en el recinto ferial Juan Carlos I de Madrid.

Las investigaciones realizadas y las facturas aportadas por el imputado, permitieron la identificación del coleccionista que se las había vendido, un vecino de Alhama de Aragón, localidad zaragozana de la comarca de Calatayud, situada a un centenar de kilómetros de Castilruiz.

En la investigación se han practicado tres detenciones y se ha imputado a una cuarta persona, además de realizarse seis registros, tres en domicilios y otros tres en establecimientos de antigüedades.