Un hombre de 58 años, su esposa y un hijo de ambos, de 28 años, murieron ayer en el incendio de su vivienda en Vélez-Málaga, en el que también resultaron heridos una mujer de 21 años, esposa de otro hijo del matrimonio, y un niño de 2 años, hijo de esta.

En el momento del incendio, que pudo ser provocado por un aparato eléctrico, según un portavoz municipal de Vélez-Málaga, no estaba en la casa el otro hijo del matrimonio, ya que este trabaja como vigilante nocturno en el club náutico de Torre del Mar. El inmueble afectado, localizado en la calle Cuesta del Visillo del núcleo de población de Torre del Mar, tiene unos setenta metros cuadrados de superficie, tres dormitorios, salón, cocina y baño, y el incendio, cuyo origen todavía se está investigando, comenzó en el salón y se propagó rápidamente al resto de las habitaciones.

Al acceder al piso, los bomberos encontraron en un dormitorio a una mujer y a su hijo de dos, heridos, por lo que decidieron trasladarlos a un balcón y desde allí los rescataron con un vehículo autoescala. Por su parte, dos de los cadáveres fueron hallados en los otros dos dormitorios y el tercero se encontraba tumbado en un pasillo.

El alcalde, Francisco Delgado Bonilla, explicó que los bomberos utilizaron cámaras térmicas para comprobar la disposición de las personas en el interior de la vivienda. Como consecuencia de esa inspección, vieron que la mujer y el niño estaban en una habitación a la que no había llegado el fuego al estar cerrada y que tenía salida directa a un balcón. Por ello, se centraron en intentar entrar a la vivienda por la puerta para salvar el mayor número de vidas, ya que con las cámaras habían observado tres cuerpos que ya no se movían.

Respecto a las causas que originaron las llamas, a falta de la investigación oficial, los primeros indicios apuntan a la intervención de algún aparato eléctrico, según el alcalde, quien añadió "que la combustión fue bastante rápida porque había muchos enseres y ropa en la vivienda", y enfatizó que, según el informe de los bomberos, "solo tardaron cinco minutos en llegar desde que han recibido el aviso".

Un vecino de la zona, Adolfo Heredia, explicó que, al ver que había fuego, junto a otros vecinos intentó abrir la puerta, pero no lo consiguieron, añadiendo "que escuchamos gritos desde el interior" y lamentó que, a su juicio, los bomberos hayan perdido tiempo al intentar entrar por la puerta y no por el balcón. Otro vecino, Bernardo Amador, señaló que pudo hablar con Juan Ruiz, el hombre de 58 años fallecido, que pedía que le sacaran porque la habitación continua estaba afectada por el fuego.