Dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría del Puerto de la Cruz-Los Realejos salvaron la vida a un hombre de 48 años que pudo perecer ahogado en la zona de Playa Jardín. La víctima intentó quitarse la vida arrojándose al mar y los funcionarios no solo lo rescataron del agua, sino que también le practicaron maniobras de reanimación en los minutos posteriores.
Aunque la información trascendió ayer, los hechos sucedieron a las 9:50 horas del viernes de la semana pasada.
Los miembros del Grupo de Atención al Ciudadano fueron comisionados por la sala operativa del 091, ya que, al parecer, una persona había abandonado su puesto de trabajo en una obra y había expresado su intención de acabar con su vida.
Una patrulla se dirigió a las playas del Castillo de San Felipe y dio una batida por la zona.
Los agentes observaron a un individuo que, vestido con un pantalón gris y chaleco reflectante, se sumergía en el agua.
A pesar de que otra persona que pasaba por allí trató de sacarlo, la víctima ofreció mucha resistencia.
Los policías nacionales se tiraron al agua con su uniforme reglamentario y consiguieron sacar al varón con problemas de respiración. A esa hora el puesto de socorrista aún estaba cerrado, por lo que en un bar consiguieron una botella de oxígeno con mascarilla, que le aplicaron y consiguieron reanimar al afectado, que fue llevado por una ambulancia al Hospital Universitario de Canarias.