Varios desconocidos forzaron la verja metálica de la puerta principal de un restaurante en la calle Garoé de Las Caletillas, en la Villa de Candelaria, y después reventaron una máquina recreativa, en la que se apoderaron de unos 700 euros. Los daños generados en el local ascienden a unos 3.000 euros, según explicó ayer el dueño del establecimiento.
Los hechos ocurrieron sobre las 04:00 de la madrugada de ayer. Además, los autores arrancaron la caja de control del sistema de alarma. La Guardia Civil investiga el caso. Los ladrones se aproximaron hasta el restaurante Las Caletillas. En primer lugar, los individuos destrozaron la verja metálica de una de las puertas del negocio.
Después, tras romper dicho acceso, los autores utilizaron una "patacabra" para arrancar la caja de control del sistema de alarma, con el fin de inutilizarla. Rápidamente, los delincuentes se dirigieron a una de las máquinas recreativas del local y literalmente la reventaron para llevarse su recaudación.
El hecho de que la alarma se activara y los vecinos oyeran la señal acústica supuestamente motivó que los delincuentes no rompieran la segunda de las "tragaperras" para sustraer el dinero y salieran de forma precipitada del local. Ayer, el propietario del restaurante aseguró que es la primera vez que sufre un asalto de estas características. Durante la mañana, un cerrajero acudió hasta el local para soldar y reparar la reja metálica dañada en el robo con fuerza.
Hasta el citado establecimiento acudieron patrullas de la Guardia Civil del puesto de Candelaria. A pesar de que dieron batidas por la zona, los agentes no consiguieron localizar a los ladrones por las inmediaciones.
Otros antecedentes
Debido a las características del suceso, las pesquisas para esclarecer este nuevo delito contra el patrimonio fueron asumidas por miembros de la Policía Judicial de la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife.
Y éste no es el único caso que está pendiente de esclarecer en el municipio de Candelaria. Hace poco más de una semana, varios desconocidos accedieron a tres viviendas en el barrio de Igueste durante la madrugada, cuando los moradores estaban durmiendo, y sustrajeron diversos efectos de valor.