Investigadores de la Guardia Civil desmantelaron un importante punto de venta de cocaína en el municipio de La Matanza de Acentejo, detuvieron a cinco personas y confiscaron un kilo de cocaína. Además, los agentes intervinieron 42.000 euros en efectivo, una cuenta con otros 6.000 y varios vehículos. Las pesquisas fueron realizadas por miembros del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de Santa Cruz de Tenerife, que atrapó a un conocido vendedor de estupefacientes en dicha zona del Norte de la isla, identificado como S.C.T. y conocido en algunos ambientes como "El Diablo". Supuestamente, este hombre, que tiene casi 40 años, ingresó en prisión provisional por orden del juez, a la espera del juicio.

Según algunas fuentes consultadas, a las fuerzas de seguridad les llamaba la atención el nivel de vida que llevaba dicha persona, a la par que no le conocían ingresos por alguna actividad laboral o empresarial.

Los primeros datos sobre la supuesta actividad ilícita de S.C.T. fueron anotados por guardias civiles del Grupo de Investigación del puesto de La Victoria y tal información fue facilitada a los especialistas del EDOA de la Unidad Orgánica de Policía Judicial.

Este grupo del Instituto Armado desarrolló la Operación Azufre, debido presuntamente al apodo por el que es conocido uno de los implicados, y arrestó a cuatro personas de nacionalidad española y a un colombiano como supuestos autores de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.

Supuestamente, entre los arrestados hay dos familiares directos de S.C.T., según una de las fuentes consultadas.

Las actuaciones comenzaron en octubre del año pasado, cuando el Grupo de Investigación del puesto de La Victoria de Acentejo detectó a varias personas residentes en La Matanza que podrían estarse dedicando a la distribución de sustancias estupefacientes.

Además, dichos agentes apreciaron que el punto de venta de la droga estaba en un garaje de la calle Canales, que es una vía paralela a la carretera general, en pleno casco urbano de La Matanza.

En dicho inmueble, situado bajo un local, los guardias civiles detectaron una especie de laboratorio para tratar la mercancía y prepararla para su distribución en cantidades menores. Todos los datos recabados fueron puestos a disposición del EDOA, que llevó a cabo la operación especial para desmantelar la organización.

Hace algo más de un mes y medio, los investigadores llevaron a cabo el registro del mencionado garaje y detuvieron a cuatro de los implicados. Este dato fue confirmado en el comunicado ofrecido ayer por el Instituto Armado, donde se explica que hasta ahora no se había hecho público el servicio porque las diligencias fueron declaradas secretas por el juez.

Los agentes aprehendieron, además del kilo de cocaína, abundante sustancia de corte, una prensa hidráulica, moldes, sellos y básculas dedicadas al tratamiento de la droga.

Alarma vecinal

El EDOA también intervino tres automóviles y una autocaravana, valorados en su conjunto en más de 100.000 euros, así como numerosos efectos. Además, el cuerpo de seguridad bloqueó una cuenta corriente con un saldo de 6.000 euros.

Al parecer, dicho punto de venta de droga había sembrado la alarma entre muchos vecinos de La Matanza, que ya en reiteradas ocasiones habían mostrado su malestar por este tipo de actividades, que perjudicaban la seguridad y la convivencia vecinal.