El principal acusado del caso Kárate, Fernando Torres Baena, dijo ayer ante la Audiencia de Las Palmas que "son falsos" los delitos de abuso sexual y de corrupción de menores que se le imputan, al igual que los otros tres procesados, quienes negaron haber abusado de sus alumnos. Los procesados, que se enfrentan a solicitudes de condena que suman 620 años de prisión, rechazaron los hechos que se les imputan tras la lectura de los distintos escritos de calificación en la primera sesión de este macrojuicio.

La Audiencia de Las Palmas comunicó ayer a las distintas partes personadas en el caso Kárate, por abusos sexuales a decenas de alumnos de un gimnasio de artes marciales, su decisión de que los cuatro procesados declaren en vista pública y valorará en los próximos días si el resto del juicio continúa o no puerta cerrada para proteger a las víctimas. El presidente de la Sección Sexta, Emilio Moya, se dirigió a acusaciones y defensas al inicio del juicio para expresarles su voluntad de evitar que este proceso -una de las mayores causas de abusos a menores instruida hasta la fecha en España- se convierta en "un festín mediático" y para pedirles opinión sobre las opciones existentes.

El fiscal del caso, Pedro Jimeno, y las dos acusaciones particulares pidieron que el juicio, que se prevé que se prolongue hasta diciembre- se celebre a puerta cerrada en su integridad para preservar la intimidad de las víctimas y para que sus vivencias sean mantenidas "en el más absoluto secreto".

En cambio, el principal procesado, el exkarateka Fernando Torres Baena, que se enfrenta a una solicitud de pena de 303 años de cárcel, pidió por boca de su letrado, Ángel Luis Colange, que todas las sesiones sean abiertas a la prensa y al público, porque "no tiene nada que esconder". Este abogado argumentó que su petición es congruente con su petición de absolución y recordó que la causa estuvo declarada secreta tres meses al inicio de la instrucción y, a pesar de ello, hubo filtraciones.

Colange opinó que celebrar la vista oral a puerta cerrada contribuiría a "victimizar más a las víctimas" y a "culpabilizar más" a su cliente. Este letrado demandó que todos los denunciantes y testigos estén presentes físicamente ante el tribunal cuando declaren, incluidos los 4 que aún son menores, porque están a punto de cumplir 18 años y cree que tienen "madurez suficiente" para mantener la acusación ante los procesados.