Miembros de la Policía Local de Candelaria y de la Guardia Civil detuvieron ayer a un hombre de alrededor de 35 años después de que protagonizara una espectacular persecución, sustrajera dos coches, golpeara a otro turismo en la autopista del Sur (TF-1), circulara de forma temeraria, condujera sin carné y, además, estaba ebrio. El individuo, al que le constan varios antecedentes policiales, fue identificado como J.F.C., que es vecino de Güímar.

Los hechos comenzaron alrededor de las 16:30 horas en la autopista del Sur. Por circunstancias que se desconocen, el individuo golpeó a otro automóvil, pero lejos de pararse, se dio a la fuga a toda velocidad. El chófer del otro vehículo alerta a la sala operativa del 112, que pone en alerta a los cuerpos de seguridad.

Ya entonces se sabe, por la matricula, que el Volkswagen Golf GTI que conduce el infractor ha sido sustraído. Una de las certezas es que el varón abandonó la TF-1 a la altura del municipio de Candelaria. Llegó hasta la céntrica avenida de Los Menceyes, donde abandonó el primer GTI.

Pero casi sin pensárselo, sustrajo otro vehículo de la misma marca y modelo, de color blanco y que, curiosamente, está en venta. Y volvió a emprender la huída, pero esta vez en dirección a Santa Cruz.

En ese momento, empezó a estar perseguido por una patrulla de la Policía Local y por otra de la Guardia Civil del puesto de Candelaria. Además, estaban en alerta agentes de la Guardia Civil de Tráfico e, incluso, una patrulla de la Policía Nacional. Algunas de esas dotaciones se hallaban colocadas en las salidas de la autopista para dificultarle la fuga.

El supuesto autor de los diversos delitos trató de despistar a los agentes a la altura del acceso a Tabaiba. En ese momento, circulaba a gran velocidad, perdió el control del turismo y se salió de la carretera, recorriendo casi todo el interior de la rotonda. El Golf GTI sufrió daños considerables, sobre todo en los bajos y el eje delantero. Además, perdió el parabrisas. El acusado lo dejó en marcha y decidió huir a pie. Cruzó la autopista transversalmente caminando y trató de esconderse en una especie de barranquillo entre los matorrales.

Pero policías locales y guardias civiles dieron una batida por la zona y lo localizaron. Agentes de atestados de la Guardia Civil de Tráfico le hicieron la prueba de alcoholemia, donde arrojó una tasa superior a 0,50, es decir, más del doble de lo permitido, pero sin llegar a ser delito.

El individuo fue trasladado hasta el puesto de la Guardia Civil de Candelaria, donde se le instruyeron las diligencias oportunas.