Los pasajeros del crucero "Thomson Majesty", que está atracado en el puerto de Santa Cruz de La Palma desde el domingo, cuando cinco de sus tripulantes murieron como consecuencia de un accidente tras caer un bote salvavidas, abandonaron ayer La Palma en un avión fletado por la naviera.

Así lo indicaron ayer a Efe fuentes de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, las cuales recordaron que anoche llegaron a La Palma inspectores del Ministerio de Fomento y del Gobierno de Malta, país en el que está abanderado el "Thomson Majesty". El accidente en el que fallecieron cinco tripulantes y resultaron heridos otros tres, que fueron dados de alta en el centro hospitalario en el que ingresaron, se produjo cuando se realizaban ejercicios de seguridad y al parecer se rompió uno de los cables que sujetaban un bote salvavidas al pescante.

Los fallecidos, naturales de Indonesia, Filipinas y Ghana, tenían entre 34 y 60 años, y sus cuerpos permanecen en La Palma hasta que se finalicen las autopsias.

La Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados aprobó ayer una proposición no de ley (PNL) en la que se insta al Gobierno a revisar, en el marco de la Unión Europea (UE), las medidas de seguridad exigibles a los cruceros de pasajeros, después del accidente del "Costa Concordia" frente a las costas italianas de Giglio en enero de 2012, en el que perdieron la vida 32 personas. La PNL contempla también la exigencia de mantenimiento de todos los medios materiales en los buques, tras la muerte de los cinco tripulantes durante un simulacro en un crucero británico en La Palma.