María del Mar Bermúdez, la madre de Sandra Palo, violada y asesinada a manos de cuatro jóvenes en mayo de 2003, mostró ayer su satisfacción con el envío a prisión de "El Rafita", uno de los asesinos, ya que "ahora saboreará lo que es estar en la cárcel".

Bermúdez considera una "buena noticia" que Rafael Fernández, "El Rafita", que tenía 14 años en el momento del asesinato y cumplió una pena de cuatro años en un reformatorio, haya ingresado ahora en prisión por un delito relacionado con el robo de un vehículo, a pesar de que la justicia no debería haber "esperado tanto", ha afirmado a Efe.

Bermúdez se ha mostrado comedida con la noticia sobre la detención y posterior encarcelamiento de "El Rafita" , y ha manifestado que no quiere hacerse ilusiones con el envío a prisión de Rafael Fernández, ya que, si vuelve a ser puesto en libertad, "el palo es más duro" para ella y su familia.

Para la madre de Sandra Palo, "la reinserción no ha funcionado" con "El Rafita", algo que, opina, se ejemplifica con los numerosos delitos cometidos por "El Rafita" y los otros tres asesinos, "que también han sido detenidos otras veces por delitos de robo".

Con respecto a la estancia en prisión de "El Rafita", ha afirmado que dentro de la cárcel, al igual que fuera, "tendrá protección" ya que es el "más mediático" de los asesinos de su hija.

"Espero que se quede en la cárcel lo máximo posible y, ya que no cumplió por la muerte de mi hija, lo haga ahora", ha declarado Bermúdez, quien ha calificado a "El Rafita" y los asesinos de su hija de "bestias".

"El Rafita" fue detenido el pasado viernes por la Policía local de Getafe cuando supuestamente trataba de quemar un vehículo robado, algo que Bermúdez ha agradecido a los agentes.

Tras intentar huir en un ciclomotor junto a su compañero y ser acorralados por los policías, "El Rafita", que conducía el vehículo, intentó atropellar a uno de los agentes, algo que finalmente no ocurrió.

El envío a prisión de "El Rafita" se produce tres meses después del décimo aniversario del asesinato de Sandra Palo, cometido junto a otros tres jóvenes cuando contaba 14 años.

Tras cumplir cuatro años en un centro de internamiento fue puesto en libertad y desde entonces ha sido detenido en múltiples ocasiones por diversos delitos de robo o pertenencia a una banda dedicada al tráfico de vehículos.