La Guardia Civil detuvo en Gran Canaria a dos personas al desarticular una red de distribución de sustancias dopantes, en una operación en la que se ha incautado de 16,8 kilos de anabolizantes y otros medicamentos prohibidos en el deporte, en su mayor parte fabricados en China. La operación Zangief se puso en marcha el 14 de agosto, cuando las autoridades sanitarias de Suiza detectaron un paquete de medicamentos prohibidos que se enviaban desde Hungría a su país para que, desde allí, fueran remitidos a Gran Canaria.

El día 29, la vigilancia sobre esos envíos permitió detener en Gran Canaria al ciudadano chileno I.E.C.C., cuando acudió a recoger un paquete postal que contenía 14,8 kilos de anabolizantes y otras sustancias que pueden producir graves daños en la salud si se consumen sin supervisión médica,

Al día siguiente fue arrestado un ciudadano polaco identificado como R.G.S., al que se acusa de "distribuir los anabolizantes entre los gimnasios y personas relacionadas con el mundo del deporte" y en cuyo domicilio se descubrieron otros dos kilos de anabolizantes y medicamentos prohibidos.

La Guardia Civil descubrió que los productos se compraban en Hungría, aunque la mayor parte se fabricaron en China, en condiciones que no permiten comprobar "el grado de control e inspección que habrían pasado para asegurar que eran aptos para el consumo".

Los detenidos en Gran Canaria cambiaban sus envases y falsificaban sus etiquetas, para aparentar que fueron adquiridos en España y contaban con todas las garantías. En la operación tomaron parte el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) y la Unidad Técnica de Policía Judicial y la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en Madrid.