Agentes de la Policía Nacional, en el marco de la Operación Dogo, detuvieron el pasado mes de julio en la localidad de El Fraile (Tenerife) a J.M.G.H. por un presunto delito de tenencia y distribución de pornografía infantil. Tras una exhaustiva investigación del material obtenido durante el registro domiciliario, se le han imputado, hasta el momento, cinco presuntos delitos de abusos sexuales a menores de edad, informó el cuerpo de seguridad.

El detenido, que está ahora en prisión, tenía un historial de trabajos cuyo denominador común era el contacto habitual con menores como conductor de guaguas escolares e instructor de artes marciales y, dueño de su propio gimnasio, impartía las clases de artes marciales en la planta baja de su vivienda.

La información e indicios de delito de abuso sexual a menores surgieron a partir de los efectos intervenidos en el registro domiciliario realizado por la Policía.

A raíz de estas sospechas, el cuerpo de seguridad realizó gran cantidad de tomas de declaración.

Fue a partir de las mismas cuando los investigadores hallaron claras evidencias de que, hasta el momento, un total de cinco menores de entre 2 y 9 años habían sido víctimas de abusos sexuales por parte de J.M.G.H., explica el comunicado de prensa.

El modus operandi del ahora detenido estaba basado, principalmente, en lograr la confianza del menor, de forma tediosa, paciente y constante, prometiendo recompensas a cambio de favores sexuales, sin utilizar intimidación ni violencia.

Para llevar a cabo sus ilícitas intenciones, presuntamente, el detenido se centraba en menores que tenían problemas en sus núcleos familiares.

Los vecinos y allegados describen al hombre como una persona con muy pocas relaciones sociales, "hosco, solitario y de vida austera" centrándose en su trabajo y en las artes marciales.

La última línea de investigación de la Policía se está centrando en el ámbito del transporte escolar, debido a los más de veinte años de ejercicio de la profesión por distintos colegios del Sur de Tenerife.

Por ello la Policía Nacional solicita colaboración de la ciudadanía para aportar cualquier dato que pueda llevar a la identificación de posibles víctimas. Para ello podrán ponerse en contacto con el Grupo de Delitos Tecnológicos mediante el número de teléfono 922849572 o el correo electrónico sctenerife.bppjdet@policia.es.

En base a las pruebas y testimonios recopilados, el detenido ingresó en prisión por orden del Juzgado de Instrucción número 2 de Arona.