La Policía holandesa, en colaboración con la Fiscalía del país, informó hoy de que en una semana se ha incautado de más de 1.700 dispositivos (ordenadores, teléfonos y memorias USB) con pornografía infantil como parte de una operación en la que por ahora no hay detenidos.

La Policía neerlandesa informó en un comunicado de que en la investigación participaron 139 detectives y once equipos de lucha contra la explotación infantil, que a lo largo de la semana pasada se incautaron de los soportes de 144 sospechosos.

Si bien la operación, que se realizó dentro de la campaña "¡Manos fuera de los niños, ojos fuera de la pornografía infantil!", se limitó a confiscar material pornográfico, los equipos policiales anunciaron que, una vez analizadas las pruebas, procederán a las detenciones.

"Esto demuestra que las personas que descargan pornografía infantil no pueden esconderse en el anonimato", señaló la Policía en un comunicado.

Indicó asimismo que sus investigadores no sólo han rastreado redes holandesas, sino también cuentas de empresas estadounidenses, como Facebook, Google, Twitter o Microsoft.

Holanda ha reforzado en los últimos meses su lucha contra la pederastia y la explotación infantil.

Entre otras medidas, el Gobierno holandés estudia retirar el pasaporte a pederastas, para evitar que se produzcan casos de turismo sexual, una propuesta que planteó en agosto la observadora nacional de la violencia sexual contra los menores.