La teniente fiscal Francisca Sánchez abrió ayer la sesión de intervenciones en el juicio por el presunto asesinato de dos niños por parte de la madre de ambos y del padre de uno de ellos en el barrio de Vistabella, en Santa Cruz de Tenerife, en diciembre de 2011. La Fiscalía considera que ambos procesados, Sonia Prieto y Jesús Ponce, son autores de las muertes violentas de Tindaya García y Joseba Ponce. El proceso judicial se limitó ayer a las intervenciones de la fiscal, la abogada del Estado, la acusación particular de los hermanos de Sonia, la acusación particular del padre del Tindaya, la acusación popular del colectivo Laxshmi y los abogados defensores de los acusados para dirigirse al jurado y las preguntas a Jesús Ponce, que ayer no se acordaba de la mayoría de los detalles de su actuación después de conocer las muertes de los pequeños. Sánchez aseguró que los acusados "no sufren enfermedades mentales" y tampoco han estado en el Hospital Psiquiátrico, sino que han tenido estancias breves en la Unidad de Psiquiatría del Hospital La Candelaria, donde se conocieron y decidieron unir sus vidas. La representante del Ministerio Fiscal planteó que los menores "no entraban en su relación personal". Sánchez señaló que no denunciaron la muerte de los niños y convivieron con los cuerpos durante varios días.

La teniente fiscal aseguró que los implicados no intentaron suicidarse de forma seria y, además, llevaban una "vida normalizada", en el aspecto económico y en la escolarización de los pequeños, por ejemplo. Francisca Sánchez está convencida de que los dos procesados comieron, bebieron y durmieron con total tranquilidad después de que los dos niños fueran asesinados en la mañana del viernes 9 de septiembre. La abogada de la acusación particular del padre de Tindaya consideró ayer que todo obedeció a un "plan infalible", después de que Jesús Ponce estuviera buscado por la Guardia Civil, después de que se le investigara por otro delito. Para dicha letrada, "se sintieron perseguidos y acorralados", por lo que crearon un "escenario teatral" de intentos de suicidio, "pues estaban seguros de que con sus antecedentes" de ingresos en una unidad de Psiquiatría se salvarían de entrar en prisión.

La letrada defensora de Sonia Prieto defendió la importancia de que esta hable ante el Tribunal de Jurado para defender su inocencia y por qué solicita su libre absolución.