Sonia, la mujer acusada de asesinar a sus dos hijos en 2011 en la capital tinerfeña, dijo a la subinspectora de la Policía Local que acudió a la vivienda cuando se encontraron los cadáveres, que los había matado ella y que lo había hecho porque tenían muy mala vida.

Así lo ha declarado hoy la subinspectora durante el juicio con jurado que se sigue en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife por la muerte de Tindaya, de once años, y Joseba, de cinco, cuyos cadáveres fueron encontrados el 13 de diciembre de 2011.

Los acusados del doble crimen son Sonia, madre de ambos, y Jesús, padre del segundo.

Los adultos se han acusado mutuamente de los crímenes y hoy la subinspectora que acudió al lugar manifestó que al llegar a la vivienda preguntó a Soria quienes eran los niños, a lo que respondió que sus hijos y que los había matado ella.

Sonia hablaba de forma clara y en tono bajo, señaló la subinspectora, la cual añadió que tras leer los derechos a la mujer preguntó por qué los había matado, y replicó que "porque tenían muy mala vida".

A la pregunta de quién les daba mala vida Sonia dio a entender que el hombre que estaba dentro, comentó la subinspectora.

Durante la tercera jornada del juicio compareció una amiga de Sonia, María Elena, quien ha visitado a la acusada en la cárcel todos los domingos que ha podido y a quien le dijo que los niños estaban en el cielo y que "ese cabrón se ha salido con la suya".

María Elena se siente culpable de los sucedido pues están convencida de que si ella hubiera estado cerca en esas fechas no se habrían producido los asesinatos.

Comentó que el primer ingreso de Sonia en el área de salud mental del Hospital Universitario de La Candelaria, donde conoció a Jesús, se produjo porque oía voces que le decían que matase a Tindaya.