Un total de cinco personas han sido detenidas y otra imputada por un delito de tráfico de drogas después de que se localizara una plantación industrial de marihuana en una zona rural de la localidad de Hernialde (Guipúzcoa). Uno de los arrestados portaba una pistola en el momento del arresto.

Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, en el lugar se aprehendieron 300 plantas de marihuana que se encontraban en el exterior de la finca. En un registro posterior de la vivienda se localizaron otras 429 plantas más en diferentes estados de crecimiento, así como toda la infraestructura necesaria para el cultivo y transformación de la marihuana en resina de hachís, lo que hace sospechar a los agentes que los detenidos puedan pertenecer a una banda de narcotraficantes.

El arresto se produjo la tarde del pasado martes, día 23, cuando una patrulla de la Ertzaintza localizó en un terreno rural del municipio de Hernialde una plantación de marihuana. Con la finalidad de identificar a los propietarios del cultivo, la Policía autonómica estableció un dispositivo de vigilancia sobre la finca.

Horas después, dos individuos eran identificados cuando se disponían a abandonar el lugar. Los agentes comprobaron que uno de ellos portaba una pistola por lo que procedieron a su detención por tenencia ilícita de armas, ya que además se localizaron dos carabinas de aire comprimido, una pistola eléctrica, diversa munición y dos chalecos antibalas en una de las habitaciones del caserío donde residían los identificados.

Posteriormente, los agentes procedieron a la identificación de otros tres varones más que llegaron al caserío en una furgoneta y que al parecer se encargaban del mantenimiento de la plantación y tratamiento y transformación de la sustancia.

En un registro del vehículo, los ertzainas hallaron dos mochilas con ropa, material informático y un buzo desechable. Tras realizar una inspección por el interior de la finca y en cuatro zonas adyacentes cercanas al caserío, los agentes localizaron 300 plantas de marihuana.

Ante tales evidencias procedieron a la detención de los sospechosos y se solicitó el correspondiente mandamiento judicial para realizar una inspección del interior de la vivienda. Después de realizar la correspondiente entrada y registro, los agentes hallaron otras 429 plantas más, distribuidas en tres dependencias, en diferentes estados de crecimiento, así como toda la infraestructura necesaria para el cultivo, recolección, tratamiento y trasformación de la marihuana en resina de hachís.

Entre otros objetos se hallaron controladores de ph, ventiladores, sistemas de aireación y lámparas de calor. Todos los aparatos eran alimentados a través de un enganche fraudulento al suministro eléctrico. Asimismo, se localizó una máquina de contar billetes, documentación falsa, moneda extranjera, balanzas de precisión, dos defensas eléctricas, visores nocturnos, tres chalecos antibalas, munición real de varios calibres, más de una veintena de teléfonos móviles y varios mandos de vehículos.

Los agentes también realizaron una inspección de cinco vehículos pertenecientes a los arrestados observando que dos de ellos tenían manipuladas las puertas con elementos desmontables, posiblemente para transportar la droga una vez transformada.

Los arrestados, con edades comprendidas entre los 27 y 39 años de edad, y de nacionalidad francesa e italiana, fueron trasladados a dependencias policiales para realizar las correspondientes diligencias. Tras ser puestos a disposición judicial en la jornada de este viernes, el juez ordenó el ingreso de dos de los arrestados en la prisión de Martutene.