La Policía portuguesa, en colaboración con la española, ha interceptado en Portugal un camión hormigonera con 2,1 toneladas de hachís con destino a España, en una operación conjunta en la que han sido detenidos cinco personas en Portugal y otras diez en Huelva.

Entre los arrestados en España, figura un sargento de la Guardia Civil y un policía local, informa hoy la Dirección General de la Policía que señala que el camión con la droga fue detenido en el localidad lusa de Tavira y antes de llegar a España por Huelva.

Ya a finales de 2013 la policía inició las investigaciones sobre esta red al descubrir la implantación en la provincia de Huelva de una organización delictiva originaria de Marruecos y que tenía previsto crear la infraestructura necesaria para comenzar la importación de hachís procedente del norte de África.

De esta forma, la red había organizado la entrada en España de una importante cantidad de droga a través de la zona sur de nuestra frontera con Portugal que ha sido abortada por las policías lusa y española.

La red empleó un camión tipo hormigonera escoltado por un vehículo ocupado por miembros de la organización de narcotraficantes que cruzaba el puente sobre el río Guadiana para entrar en Portugal.

Una vez en el país luso, el vehículo se dirigió a un paraje solitario de la zona de Tavira, aparcando junto a una vivienda rural.

Es en ese momento cuando los agentes de los dos países intervienen, detienen a cinco personas, tres de nacionalidad española, un ciudadano rumano y un ciudadano marroquí.

Una vez asegurada la zona, los investigadores reclamaron la presencia de los bomberos de Tavira para poder abrir una trampilla practicada en la hormigonera y que se hallaba oculta con masilla y poliéster. Del interior de la oquedad extrajeron un total de 70 fardos de hachís con un peso de 2.140 kilos.

Paralelamente, la Policía Nacional arrestó en la localidad onubense de San Juan del Puerto a los tres encargados de recibir el camión con la droga, además de otras siete personas, presuntos miembros de la organización de narcotraficantes, entre ellos un sargento de la Guardia Civil y un policía local.

En los tres registros domiciliarios practicados en las viviendas de los máximos responsables de la organización, los agentes se han incautado de 1.300 euros en efectivo y de una pistola.

Las investigaciones han sido llevadas a cabo por agentes del Grupo de Estupefacientes de la comisaría de Cartagena, de la Udyco de la Comisaría Provincial de Huelva y de la Polícia Judiciária de Portugal.