Cuatro condenados por terrorismo, entre ellos un ciudadano ruso, fueron ejecutados ayer en una prisión de Faisalabad, en Pakistán, después del levantamiento de la moratoria de ejecuciones tras el sangriento asalto a una escuela.

Los cuatro presos ahorcados, entre ellos el ruso de padre pakistaní Akhlaq Ahmed, estaban condenados por un ataque suicida contra el expresidente pakistaní Pervez Musharraf, según recoge el diario local Dawn.

Los otros tres ejecutados junto a Akhlaq Ahmed en una cárcel del distrito de Faisalabad, en la provincia de Punyab, fueron Zubair Ahmed, Rasheed Qureshi y Ghulam Sarwar Bhatti, condenados por el atentado en 2003 con dos coches bomba contra Musharraf que causó 16 muertos.

La ejecución se produjo con un amplio dispositivo de seguridad alrededor de la prisión, similar al que se prepara en la prisión central de Lahore, capital de la provincia, donde están previstas otras cuatro ejecuciones para los próximos días, según este medio. El viernes fueron ejecutados también en Faisalabad otros dos condenados por el ataque contra Musharraf.