Miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil con base en Playa de las Américas realizaron una intervención para la recuperación de elementos de patrimonio histórico-artístico en las medianías altas del municipio de Adeje.
Agentes de dicha unidad especializada, acompañados por técnicos del Cabildo y del Museo de la Naturaleza y el Hombre de Tenerife, acudieron al caserío de Tijoco Alto, donde recuperaron diversas piezas de la época prehispánica.
En esta ocasión, resultó clave la colaboración ciudadana para que diversos elementos de la cultura aborigen fueran trasladados al organismo público correspondiente, según informa el jefe del Seprona a nivel provincial, el teniente Fernando Luis Vázquez Tejero.
Durante años, un vecino de dicha localidad se había dedicado a la recogida de piezas en uno o varios yacimientos guanches de dicha parte de Adeje.
Al fallecimiento de este hombre, sus herederos decidieron poner en conocimiento de la Guardia Civil la existencia de dichos elementos, ya que consideraban que debían gestionarlos una administración pública.
Miembros del Seprona con base en Playa de las Américas, los técnicos insulares y del Museo insular de la Naturaleza y el Hombre efectuaron una primera inspección en la vivienda donde se hallaban las piezas y determinaron que algunas de ellas sí poseen características de haber sido utilizadas por los guanches que habitaron en los altos de Adeje.
En concreto, los especialistas encontraron dos vasijas, cuatro piedras usadas como ruedas de molino, fragmentos de otras piedras, siete conchas de lapas, así como una caja grande con restos fragmentados de vasijas y otros utensilios aborígenes que formaban parte de su vida cotidiana.
Las mencionadas piezas fueron llevadas a un laboratorio para un estudio más detallado y profundo. De hecho, los especialistas continúan en esa tarea de análisis.
Sobre dicho hallazgo también fue informada el área de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Adeje, que dirige Desiderio Afonso Ruiz.
Desde el Servicio de Protección a la Naturaleza del Instituto Armado recuerdan a la ciudadanía que es obligatorio poner en conocimiento de las administraciones públicas y de las fuerzas de seguridad el hallazgo de cuevas, espacios rituales o ceremoniales o asentamientos prehispánicos, por ejemplo, puesto que la legislación no permite ocuparlos, ya que se tratan de importantes pruebas para conocer cómo era la vida antes de la Conquista en Tenerife, a finales del siglo XV.
El teniente Vázquez Tejero explica que, en materia de protección del Patrimonio Histórico, el Seprona lleva a cabo servicios puntuales y la labor se centra más en las acciones preventivas en potenciales zonas de expolio que en las tareas reactivas ante irregularidades.
Y, además, ante de afrontar acciones coercitivas, el objetivo de los miembros de esta unidad especializada es buscar la colaboración de los ciudadanos y colectivos protectores de la naturaleza y el patrimonio histórico para detectar posibles expolios y atentados medioambientales.
Uno de esos servicios se desarrolló en unas cuevas ocupadas ilegalmente por un individuo en las proximidades de la ermita de Nuestra Señora de Los Reyes, en El Hierro, hace varios meses.
En ocasiones, para acceder a determinados enclaves de difícil acceso, el personal del Cabildo o del Museo de Antropología de Tenerife es asistido por otros guardias civiles, los del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (Greim).
Además, los guardias civiles destinados en el Seprona reciben formación básica para saber intervenir en la elaboración de informes en materia patrimonial.