Agentes del Cuerpo Nacional de Policía investigan las circunstancias que rodearon la muerte de una bebé de pocos meses de vida durante la jornada del pasado lunes en el municipio de Adeje.

Los hechos ocurrieron en una vivienda situada en una urbanización de Torviscas Alto, en Costa Adeje.

La niña, de apenas unos siete meses de vida, fue encontrada por su propio padre tapada con una sábana en la cuna.

El progenitor, que es profesional sanitario, le realizó maniobras de reanimación básicas, a la vez que alertó a la sala operativa del 1-1-2 para que activara a los recursos de seguridad y emergencias necesarios.

Hasta el lugar acudió personal sanitario del Servicio de Urgencias Canario (SUC), que únicamente pudo confirmar el fallecimiento de la bebé.

Durante la mañana de ayer, agentes de la Brigada de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría del Sur de Tenerife estaban a la espera de conocer los resultados de la autopsia a la pequeña, con el objetivo de conocer las circunstancias reales que rodearon su fallecimiento.

Inicialmente, los agentes y el personal sanitario que acudieron a la vivienda no hallaron signos externos de violencia en la bebé.

Sin embargo, lo que levantó todas las alarmas fue que, durante las primeras horas, tras el hallazgo del cadáver, la madre de la pequeña no pudiera ser localizada por su pareja.

Hasta el lugar acudieron agentes de la Policía Local de Adeje y funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía.

Durante la tarde del pasado lunes, las fuerzas de seguridad consiguieron localizar a la madre de la bebé fallecida, que supuestamente tiene algún problema de salud mental.

De hecho, la mujer fue trasladada hasta la Comisaría del Sur de Tenerife, donde los agentes le tomaron declaración para saber por qué abandonó la vivienda donde murió su hija y preguntarle si sabía por qué murió la pequeña.

Las tareas de investigación continuaron ayer.